El Pont Trencat

El acceso al llamado Pont Trencat (Puente Roto), alzado sobre el río Fluvià en el extremo más meridional del término de Montagut i Oix, debe realizarse, desde la autovía A-26, tomando la N-260 hacia Castellfollit de la Roca. Pasado el km 75 de dicha carretera, se indica el acceso al vecindario dels Angles; luego la carretera cruza la autovía por un pequeño túnel, y poco después nace un camino a la derecha que lleva hasta el puente, que queda debajo de un viaducto de la autovía.

Se considera que el origen del puente es romano, puesto que ya en la alta Edad Media se menciona la vía de tradición romana que seguía el valle del Fluvià, de la que formaría parte. Esta vía era una calzada enlosada de unos 2 m de ancho, cuyos tramos conservados suman unos 100 m de largo, algunos de ellos localizados en el cerro del Cós. En cuanto a las noticias históricas hay que decir que en torno a 1281 se cita como el puente de Golors. En cambio, en 1442 ya era conocido como el puente de Montagut. En 1641 fue destruido por una gran riada, y unos 30 años después aparece documentado porque los cónsules de Montagut pidieron ayuda al consejo de Olot para su reconstrucción, que les fue denegada. F. Montsalvatge recoge también la voladura del puente que llevaron a cabo tropas francesas en 1659.

Los restos que se han conservado se hallan en la ribera derecha del Fluvià y forman un ángulo respecto al curso del río. Se observan 13 m de construcción paralelos al cauce, y unos 21 m en perpendicular a éste. Se conservan parte los basamentos de por lo menos cuatro de los pilares que sostenían los arcos, con perfiles diversos. En la sección paralela al río (de unos 3,2 m de ancho y una altura máxima de 3 m) se hallan 2 arcos, uno de medio punto y el otro de cuarto de círculo, que permite que este primer tramo repose sobre la sección perpendicular. En la sección perpendicular hay otros 3 arcos de diferentes dimensiones: un primero de 2,8 m de luz, un segundo de unos 6 m de luz (que vemos según una restauración del año 2001, en la que se consolidó y se reconstruyó, cambiándole su aspecto), y un tercero de 1,5 m de luz. El aparejo que se considera de época románica está compuesto de sillares de dimensiones muy diversas pero de buena labra, dispuestos a soga y tizón entre ripio y argamasa abundante. Los arcos se construyen a partir de losas alargadas de distintas dimensiones dispuestas en librillo. Pese a que para la construcción del Pont Trencat es probable que se aprovechara alguna estructura anterior, se considera que los restos conservados pertenecen a los siglos xii o xiii.

Texto y foto: Marcos Ojosnegros Marín

Bibliografía

Monsalvatje y Fossas, F., 1889-1908, XI, p. 208.