TREMP

Castillo de Puigcercós

El actual pueblo de Puigcercós, situado unos 3 km al sur de Tremp, sustituyó al anterior a finales del siglo xix, cuando la anterior población fue abandonada entre 1848 y 1889, tras unos fuertes corrimientos de tierra que provocaron el hundimiento parcial de la colina en la que se encontraba. Gran parte de sus edificios entre ellos el castillo y la iglesia de Sant Martí, fueron a parar al fondo del barranco de Espona, dando origen a un precipicio en la zona oeste de la colina, que desde entonces ofrece una imagen singular del antiguo lugar de Claret. En su día el antiguo núcleo habitado disfrutaba de unas amplias vistas sobre buena parte del territorio de la Conca de Tremp y parte de la Conca Dellà, y desde él se divisaban numerosas de las fortificaciones de dichos territorios.

Las primeras noticias relacionadas con el castillo de Puigcercós se remontan a  941, cuando en un documento de venta de tierras se cita como castro Poga Circuso. De nuevo aparece mencionado en 1012, cuando el castrum de Puiocercos figura incluido en la relación de bienes que el conde Ramon iv otorgó al monasterio de Gerri. Estuvo vinculado durante los primeros siglos al término del vecino castillo de Mur, cedido por Ramon v a Arnau Mir de Tost. Debido a la importancia del castillo de Mur, otras fortificaciones le serían añadidas posteriormente, como las de Estorm, La Guàrdia, Moror o Alzina. En 1194, el castillo de Puigcercós, junto a los sitios de Presià, Sant Cristòfol y Alzina, sería donado por Bernat de Mur al monarca Alfonso el Casto, quien volvería a infeudarlo al mismo señor. Pocos años más tarde, en 1200, serían Arcard ii y su esposa Beatriu, señores de Mur, quienes comprarían el castillo y sitio de Puigcercós a Ramon de Puigcercós y Berenguera, por seis mil sueldos jaqueses.

El único vestigio que se ha conservado del castillo es la parte oriental de los muros de una torre de planta circular, en la cual, las reducciones escalonadas en el grosor del muro que se aprecian en su cara interior, son indicio de que tenía, al menos, cuatro niveles. La puerta debía de estar situada en alto, en el lado norte del primer piso, pues se observan trazas de la misma. También han pervivido varias aspilleras. El aparejo utilizado en la construcción de esta torre está compuesto por sillarejo de tamaño desigual, aunque en su mayor parte de pequeñas dimensiones, dispuesto, de forma bastante ordenada, en hiladas horizontales. Podría datarse esta torre en el siglo xii.

Texto y foto: David Rico Tortosa

Bibliografía

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