Identificador
09555_01_006
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42º 58' 26.24'' , Lomg:3º 34' 4.36''
Idioma
Autor
José Luis Alonso Ortega,María José Martínez Martínez
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Campo
Municipio
Villarcayo de Merindad de Castilla la Vieja
Provincia
Burgos
Comunidad
Castilla y León
País
España
Claves
Descripción
LA PEQUEÑA IGLESIA PARROQUIAL de Campo, situada en el extremo sudoccidental del caserío, constituye hoy el único testimonio de aquel antiguo monasterio. El edificio románico, levantado combinando el sillarejo de la nave con la sillería de la cabecera, sumamente tosco, ha sufrido numerosas reformas debido a la escasa solidez de la construcción original. Lo que hoy resta nos habla de un sencillo templo de nave única con portada abierta en el muro meridional, hoy cobijada por un pórtico con cubierta de madera a un agua y rematado por cabecera cuyo actual ábside es fruto de una moderna reconstrucción. La portada se construye en torno a un irregular arco de medio punto liso sobre jambas con cimacio de burdos tacos, y dos arquivoltas, la interior con un rudo y grueso baquetón que recae en una pareja de columnas acodilladas. Éstas se coronan con sendos desproporcionados capiteles vegetales, ambos decorados con sencillas hojas lanceoladas y acanaladas, con la particularidad en el caso del lado derecho de acoger bolas en la parte baja de la cesta y astrágalo sogueado. De las basas sólo resta la izquierda. La a rquivolta exterior es lisa, y sobre ella corre una chambrana decorada con tres filas de tacos. Junto a la portada, la decoración de bárbaros tacos es el único elemento ornamental exterior del edificio, que orna las impostas que, a tres niveles, recorren los paramentos exteriores de la fábrica románica. La imposta superior se corresponde a la cornisa, sin canes, que remata el muro . La primitiva construcción románica se vio alterada por el posible hundimiento de la cabecera, sustituida en época moderna por la actual, de planta trapezoidal y levantada en sillería. El muro septentrional de ésta conserva parte del lienzo románico, animado por las tres impostas con tacos que vimos en la nave; sobre este muro norte se alzó la moderna espadaña, con dos troneras y remate a piñón. Al sur de la nave se adosó la sacristía, mientras que por el norte vemos una moderna construcción. En la zona inferior del hastial occidental de la nave se utilizaron enormes sillares, quizá reutilizados. El interior, muy reformado, muestra la nave con moderna cubierta de cielo raso, conservando -más que probablemente remontado- el arco triunfal primitivo, de medio punto y doblado. El arco interior apea en una pareja de semicolumnas adosadas al machón, sobre basas de tosco perfil ático y coronadas por rudos capiteles vegetales, de abultado astrágalo, hojas lanceoladas de nervio central y bolas el del lado del evangelio, y hojas ensiformes de nervio central el de la epístola, ambos bajo cimacios que repiten el ajedrezado. Resta de la primitiva cabecera -quizá en origen compuesta de tramo recto y desaparecido ábside semicircular-, al interior, el arranque de los muros y la imposta inferior con tres filas de tacos, siendo moderno el resto, incluida la bóveda de cañón que la cierra. El hermoso sagrario que hoy hace función de retablo procede de la iglesia monasterial de San Salvador de Oña. En el muro septentrional de la nave, junto a la cabecera, se abrió otra puerta de rehecho arco de medio punto sobre impostas achaflanadas, hoy cegada al igual que una ventana también de arco de medio punto y derrame interior en el mismo muro. Imprecisa cronología manifiesta la pila aguabenditera situada junto a la portada. De 44 cm de altura, presenta base cilíndrica escalonada con boceles aplastados y, en la misma pieza, copa cuadrada rematada por cuatro bolas en los ángulos.