Santa Maria de Montnegre
Ermita de Santa Maria de Montnegre
La capilla de Santa Maria de Montnegre se encuentra a 11 km de Quart, en el sector montañoso de la sierra de Montnegre. Se trata de una iglesia rural construida entre fines del siglo xi y comienzos del xii, pero completamente transformada por una reforma efectuada después del incendio sufrido en 1928. Se llega a ella tomando la carretera GIV-6641 a la salida de Quart, que en su último tramo es pista forestal.
Consta de una nave única, actualmente incompleta, que cierra con un ábside semicircular más estrecho, en el que se abre una ventana doblemente abocinada y descentrada. La nave va cubierta con una bóveda de cañón reforzada por un arco formero y presenta una altura muy superior a la que es habitual en las iglesias románicas, lo que ha llevado a suponer que debió sobrealzarse durante la intervención efectuada en el primer tercio del siglo xx. La puerta de acceso a la iglesia se abre a los pies de la nave y va precedida de un porche adosado a la masía adyacente, ejecutado en época muy posterior a la obra de la iglesia. A la izquierda de la puerta, se encuentra la escalera de caracol que sube al coro.
El campanario, construido o reformado tal vez en épocas más modernas, se alza encima de la nave. Consta de un solo piso abierto a los cuatro vientos con vanos arqueados y coronado por una cubierta a cuatro aguas. Arquitectónicamente, responde a la tipología de esconjuradero (en terminología local, comunidor), una construcción situada en la parte superior o en las inmediaciones de una iglesia en la que el sacerdote conjuraba y exorcizaba el tiempo. Gracias a los estudios etnográficos sabemos que, en las áreas rurales pirenaicas y prepirenaicas, este tipo de ritual de tentenublo estuvo activo hasta mediados del siglo xx y su función principal era provocar lluvias en épocas de sequía o amainar las temidas granizadas.
Texto y foto: Luisa Amenós Martínez
Bibliografía
Badia i Homs, J. y Olavarrieta i Santafè, J., 1987, pp. 182-183; Catalunya Románica, 1984-1998, V, p. 189.