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Vista del cementerio

Identificador
49214_01_020
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
41º 26' 24.52" , -6º 16' 50"
Idioma
Autor
Jaime Nuño González
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)

 

País
España
Edificio (Relación)

Iglesia de Santa María Magdalena

Localidad
Cozcurrita
Provincia
Zamora
Comunidad
Castilla y León
País
España
Descripción
LA IGLESIA ES UN PEQUEÑO edificio en cuya construcción se emplea sillería y mampostería de granito, un material muy abundante en el entorno. Está formado por cabecera cuadrada, con cubierta a dos aguas, sacristía adosada a su costado norte, nave única, con portada al norte, cobijada bajo humilde pórtico y, finalmente, espadaña a los pies. El cementerio se adosa al lado septentrional. La espadaña está hecha en buena parte de sillería, la cabecera de sillarejo y la nave de mampostería y sillarejo, lo que quizá pudiera poner de manifiesto la existencia de tres grandes etapas constructivas, de muy distinta cronología. La cabecera creemos que es íntegramente obra posmedieval, así lo confirma el alero y la ventana sur, que parecen formar parte de una construcción unitaria. La nave, más ancha que la capilla mayor pero de su misma altura, presenta un contrafuerte de sillería a cada lado. Pudiera tener un origen románico, aunque los contrafuertes son muy posteriores, además de que algunas reformas habrían hecho desaparecer por completo el habitual alero de canes. En el lado sur las reformas son muy evidentes, con la parte inferior del paramento hecha a base de sillarejo -que creemos que puede ser obra románica, aunque carece de cualquier elemento estructural o decorativo evidente- y con la parte superior de mampostería menuda, ya renovada en siglos posteriores a la Edad Media. Más problemas de identificación de etapas existe en el muro norte de la nave, al estar parcialmente cubierto por la sacristía y en buena parte revocado. Sin embargo, aquí se halla la portada, muy sencilla, aunque de clara filiación románica. Se ubica en el extremo occidental del muro -una posición muy rara-, a ras de muro y está hecha a base de sillería granítica, formada por arco de medio punto doblado, sin chambrana, con dovelas lisas, de arista viva, aunque alguno de los elementos muestra incisiones radiales, como si se quisiera haber dibujado un mayor despiece de dovelas. Apoyan los arcos sobre pilastras simples, con impostas de listel y chaflán. La espadaña, sobre el hastial, es tipológicamente románica, aunque parece que está rehecha en época incierta. Se halla a ras de muro con la fachada sur (aunque no se ensambla perfectamente con ella) y desplazada hacia el mediodía respecto al norte, lo que también puede ser indicio de que quizá todo el muro sur esté rehecho. En todo caso es un pieza relativamente baja, con zócalo ligeramente sobresaliente, con un cuerpo inferior rectangular, macizo, de mampostería -aunque con dos hiladas superiores de sillería-, ligeramente más ancho que el cuerpo superior, ya completamente de sillería. Este último cuerpo tiene una base recta, de dos hiladas, y sobre ella se levanta el agudo piñón, clareado con dos ventanales de medio punto, de extrema simplicidad. En el interior del templo nada se ve de cronología románica y la humildad constructiva es la nota característica. Destaca el arco triunfal y otro más que articula la nave en dos tramos, ambos de diafragma, de medio punto, sobre pilastras, de cronología barroca. En conclusión, aunque autores como Guadalupe Ramos consideran al conjunto del templo como obra románica, ya del XIII, en nuestra opinión nos hallamos ante un edificio de difícil caracterización, en el que algunos elementos de la caja muraria de la nave pudieran corresponder a la primitiva fábrica románica, aunque el único elemento claramente asignable a esta cronología es la portada, que sigue las pautas de rusticidad y simplicidad tan características del románico tardío del occidente zamorano y que pueden verse en iglesias como las de Abelón, Pasariegos, Malillos, Marquiz de Alba o Las Torres de Aliste. En cuanto a la espadaña el problema que se presenta es el mismo que encontramos en otras numerosas poblaciones de la comarca, e incluso dentro de buena parte del ámbito rural castellano-leonés: responde a un modelo de indudable origen románico, pero dada la permanencia del tipo a lo largo de los siglos, resulta casi imposible asignar una fecha concreta a su construcción.