EL MUSEO DE GUADALAJARA fue fundado el 19 de noviembre de 1838 en el ex Convento de la Piedad, convirtiéndose de esta manera en el primer Museo Provincial de España. Desde 1973 se encuentra ubicado en el edificio del Palacio del Infantado, una magnífica construcción del siglo XV. Dentro de sus salas alberga tres restos románicos: una pila bautismal, una estela discoidea y una estela tabular. PILA BAUTISMAL Piedra arenisca. Altura 70 cm; diámetro exterior 141 cm; diámetro cuenco 86 cm. Procedente de Illana. Hallazgo casual junto al río Tajo. (Invº. BA-224). Pieza hemiesférica con embocadura lisa muy deteriorada. El labio presenta una moldura sencilla que lo separa del cuerpo central, decorado con acanaladuras oblicuas que dejan entre ellas espacios desiguales. En el interior del más ancho aparecen talladas dos cruces inscritas en círculos y una cruz latina inserta en un triángulo. Alrededor del hueco donde se instalaría el fuste, se desarrolla una franja decorada con una retícula de rombos. En el fondo se abre una perforación circular de 11 cm de diámetro que cala al exterior. Toda la superficie aparece desgastada de forma homogénea, algo que, junto a la perforación, puede indicar un último uso como rueda de molino. Su tipología y la decoración permiten situarla entre los siglos XIII y XIV. ESTELA DISCOIDEA Piedra caliza. 45 x 30 x 19 cm. Procedente de Villacadima. Hallazgo casual. (Invº. ARQ-6.602). La pieza muestra una gran calidad de talla tanto en su acabado como en la decoración. Una de sus caras la ocupa una cruz patada y la otra una estrella de seis puntas formada por dos triángulos entrelazados y con un círculo central inserto en el hexágono resultante, ambos temas inscritos en círculos. Dos líneas paralelas incisas verticales recorren el canto en toda su altura. La transición del disco al vástago se realiza mediante un acusado rebaje en el cuello. Posiblemente proceda de la necrópolis de la iglesia de Villacadima y su cronología puede situarse en el siglo XIII. ESTELA TABULAR Piedra arenisca. 64 x 41 x 19 cm. Procedente de Sigüenza. Excavación arqueológica en la Calle San Roque, 17. (Invº. ARQ-9.342) Únicamente conserva la parte superior que presenta los cantos rebajados, y ambas caras decoradas con flor cuatripétala que apenas forman la cruz patada que pretende este motivo. Se encontró reutilizada como parte de la cubierta de una tumba perteneciente a un conjunto de sepulturas excavado en un solar cercano a la catedral de Sigüenza.