Identificador
33875_05_009
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
43º 18' 46.26" , -6º 31' 46.27"
Idioma
Autor
Diego Martínez Fuenteseca
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Sobrado
Municipio
Tineo
Provincia
Asturias
Comunidad
Principado de Asturias
País
España
Claves
Descripción
LA IGLESIA se alza en la parte baja del pueblo y su fábrica actual es de época barroca. En la actualidad no queda nada de la fundación original del siglo IX. Es de nave única cubierta de madera y con presbiterio rectangular cubierto de bóveda de cañón apuntado. Tiene añadidas, a los lados de la nave y del presbiterio, un total de cuatro capillas con importantes retablos barrocos e imágenes realizadas entre el medievo y el siglo XVIII. Abundan las imágenes góticas, como la de un Crucificado de tres clavos y expresión plácida, y una Virgen que amamanta al Niño. Pero, sin duda, la más destacable es una imagen tardorrománica de la Virgen con el Niño, que repite la iconografía de la theotokos un tanto evolucionada y encaminada al naturalismo. Esa Virgen madre responde a presupuestos estilísticos próximos al gótico, por lo que podríamos fechar la obra en el siglo XIII. Se trata de una figura de madera policromada, con su parte posterior sin tallar, que mide 70 cm de alto por 20 cm de ancho y con un perímetro aproximado de 68 cm. María aparece entronizada; con su mano izquierda sujeta el costado del niño que acoge en su regazo, y con su mano derecha muestra la manzana. Esa mano que sostiene la manzana ya no se pega al cuerpo y se incluye como un elemento añadido al volumen de la obra. Pese a lo hieráticas y poco comunicativas que son las figuras, el gesto protector de la mano izquierda de la madre (superior en tamaño y con diferente factura) refleja un sentimiento de mayor humanidad al acostumbrado en las imágenes de este período. El Niño no aparece ubicado en el centro de la composición, sino que se desvía un poco hacia uno de los lados. Ha perdido su mano derecha, mientras que su izquierda aparece sujetando la bola del mundo. Ambos, Madre e Hijo, portan en su cabeza una corona, que en el caso de la Virgen se combina con un tocado. La Virgen viste un traje talar de color rojo y una capa larga de color verde, descubierta por su lado izquierdo. Este conjunto deja entrever a sus pies la punta de unos escarpines negros. Hay un interés por reflejar de manera real el movimiento del ropaje, con lo que los pliegues adquieren una forma más naturalista. Del mismo modo, el Niño viste una túnica lisa que también deja entrever la punta de sus pies, en este caso descalzos. Los rostros son ovalados y la expresión contenida. La pieza guarda, en un lamentable estado de deterioro, gran parte de su policromía que puede ser la original. El grado de conservación de la obra es aceptable, aunque se constata la presencia peligrosa de elementos xilófagos. Como último elemento destacable de este templo cabe mencionar una pila bautismal de época medieval avanzada y que no se corresponde cronológicamente con la del desaparecido monasterio de Sobrado.