Santuario de la Mare de Déu del Mont

El santuario se encuentra en un paraje de gran belleza natural, coronando el pico de la sierra del Mont, a 1123 metros de altitud, en el extremo meridional del antiguo municipio de Bassegoda, actualmente agregado a Albanyà. Puede accederse al lugar por la carretera N-260 que conduce de Besalú a Roses. Transcurridos unos 10 km, a mano izquierda encontraremos indicado el acceso a Sant Martí de Seserres y Mare de Déu del Mont. La carretera se eleva por la montaña dejando atrás la llanura de Sous, donde se asienta el antiguo monasterio de Sant Llorenç, y continúa hasta la cima de la montaña.

Son pocas las noticias conocidas del santuario mariano de la Mare de Déu del Mont. La primera referencia documental remite a 1222, momento en que se alude a los Clerici Beatae Mariae de Monte. Esta noticia ha sido utilizada para suponer la existencia de una capilla erigida en lo alto de la montaña. Sin embargo, todo parece indicar que el documento en cuestión se refiere al culto efectuado en el monasterio de Sant Llorenç de Sous, en lo que pone en duda la existencia de un santuario previo al actual. En cualquier caso, debemos esperar hasta la centuria siguiente para encontrar la primera mención a la iglesia. Entre los años 1311 y 1318, el abad de Sant Llorenç de Sous, Bernat, hizo construir una iglesia de nueva planta donde quizás pudo haber existido una primitiva capilla románica. Tras un largo periodo de decadencia, el papa Clemente VIII vinculó el monasterio de Sous al de Sant Pere de Besalú.

La iglesia actual, construida íntegramente en el siglo xiv, constituye un ejemplo paradigmático de la larga pervivencia de las fórmulas del románico tardío. Presenta planta basilical de una sola nave cubierta con bóveda de cañón apuntada y rematada por un ábside semicircular. Éste, parcialmente visible, se esconde entre las dependencias anejas al templo. El acceso, en el muro occidental, se realiza mediante un arco de medio punto cuyo derrame permitió la realización tres arquivoltas lisas, carentes de ornamento. El tímpano conservaba un pequeño fragmento de la decoración original, con una representación de un ángel que sostiene un estandarte, el cual, probablemente, flanquearía la Maiestas Domini que debió presidir la composición. En la actualidad, este fragmento se custodia en la hospedería del santuario. La portada repite la estructura compositiva de otras iglesias de la zona, como Sant Bartomeu de Pincaró y Sant Miquel de la Miana. En la misma fachada observamos una cornisa sobre la que se abre una ventana de doble derrame. Finalmente, junto a la puerta, se yergue el campanario de planta rectangular, con ventanas en cada uno de sus lados.

Texto y foto: Carles Sánchez Márquez

Bibliografía

Baig i Aleu, M., 2010; Carreras i Pera, J., 1988; Catalunya Romànica, 1984-1998, IV, pp. 137-139; Guardiola i Rovira, R., 1964, pp. 53-56; Marqués i Planagumà, J. M., 1984-1985, pp. 107-136; Montsalvatge i Fossas, F., 1889-1919, XII, p. 99; Murlà i  Giralt, J., 1983, p. 22; Rodríguez i Vilagran, À., 2004, pp. 145-162; Sala i Canadell, R. y Puigdevall i Diumé, N., 1977, p. 22; Tremoleda, J., 2010.