LES AVELLANES I SANTA LINYA

Iglesia de Santa Maria de Santa Linya

La iglesia dedicada en su momento a santa María y en la actualidad a Nuestra Señora de la Asunción, se halla en la parte baja de Santa Linya, al lado del monte en el que estaba situado el desaparecido castillo. El gran campanario moderno hace que sea visible desde cualquier punto del pueblo.

El templo, aparece documentado por primera vez en la carta de franquicia de Santa Linya, nombre que se daba al conjunto de privilegios concedidos para potenciar la repoblación de villas y ciudades, en las cuales se daban unas condiciones difíciles para el desarrollo de las actividades económicas, o porque había un gran riesgo por su proximidad a la frontera. En dicho documento, redactado en 1036,  el conde de Urgell, Ermengol II, y su esposa Constança, concedieron la petición hecha por parte de los señores feudales Arnau Mir de Tost e Isarn Ramon en representación de los habitantes de Santalinya. Se especifica en la carta que las primicias de los bienes dentro del término serían para la parroquia de Santa Maria de Santa Linya y para los curas de la misma población que se hicieran  cargo del templo. Después de la muerte de Arsenda, su esposo Arnau Mir de Tost, hizo donación de vestidos y piezas de tela a diferentes templos, entre ellos, un cobertor a Santa Maria. En la bula que el papa Urbano II dictó a la canónica de Santa Maria de Solsona en 1097, la parroquia de Santa Linya aparecía como sufragánea de la misma.

Pocos vestigios quedan del antiguo templo románico, que ha sido objeto de distintas transformaciones a lo largo de los siglos. Una gran pared ubicada en el cementerio, no permite observar a primera vista, lo que seguramente sea la antigua ventana absidal. Aunque dicha abertura se encuentra tapiada, conserva el despiece original realizado en piedra calcárea. Destaca el arco de medio punto monolítico en el que, con líneas incisas, se simulan las separaciones de unas inexistentes dovelas. La utilización de un arco monolítico también está presente en los cercanos templos de Sant Salvador de Santa Linya y Santa Maria de les Avellanes. El antepecho del vano también está formado por una sola pieza, al igual que sucede en las iglesias de Santa Maria de Vilanova de la Sal y Santa Maria de les Avellanes, las dos ubicadas a menos de 10 km de Santa Linya. El resto del ábside es resultado de la transformación posterior del templo.

Texto y fotos: Nuria Font Marco

Bibliografía

Catalunya Romànica, 1984-1998, XVII, pp. 213-214; Font i Rius, 1969-1983, I, pp. 34-35; Fité i Llevot, F. y González i Montardit, E., 2010, p. 190; Mora Giné, X., 2010, pp. 152-153.