Identificador
09512_06_004
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
Sin información
Idioma
Autor
Augustín Gómez Gómez,José Luis Alonso Ortega
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Torres de Medina
Municipio
Medina de Pomar
Provincia
Burgos
Comunidad
Castilla y León
País
España
Descripción
EL RESTO ROMÁNICO AQUÍ conservado es la ermita de Nuestra Señora de las Torres, que no aparece recogida por Madoz, mientras que Julián García Sáinz de Baranda sí lo hace, indicando que “es la patrona del pueblo, de construcción del siglo XVII y ábside romana (sic) con una interesante efigie de la Virgen”. Esta imagen se conserva en la iglesia parroquial del pueblo y en cuanto al ábside hay que suponer que es una errata, siendo “románico” lo que quería indicar este autor. La ermita es una construcción de canto rodado recubierto de mortero y con sillares en las esquinas. Tiene planta rectangular con ábside semicircular y un pequeño tramo recto presbiterial, sin separación. El edificio ha sufrido varias transformaciones, probablemente por los pobres materiales de su construcción, conservándose de época románica sólo el ábside y el tramo recto del muro hasta las esquinas, que como son de sillería han aguantado mejor el paso del tiempo. El ábside es liso y está rematado con canecillos en nacela sobre los que apoya una cornisa también en nacela. En el lado de la epístola se abrió una ventana en siglos muy posteriores. La puerta de acceso se encuentra en el muro sur, en uno de los sectores que ha sido transformado en época moderna, aunque se hayan reutilizado dos cimacios en el arco de la puerta, decorados con motivos vegetales y unos adornos semiesféricos de talla desigual, que en algunos casos llegan a ser rostros humanos. El interior de la ermita está muy modificado y no encontramos elementos románicos bien definidos ya que todos los muros están recubiertos de mortero. En el lado del evangelio y junto a la esquina del muro de la cabecera se conserva en obra de fábrica lo que fue el apoyo de un altar, que actualmente no existe, donde se han re utilizado elementos de época románica, como es un sillar con tres pequeños relieves. Los tres son circulares, rodeados con una fila de perlas, y con su interior decorado con palmetas, elementos vegetales y un rostro humano respectivamente. La pila bautismal es igualmente románica. Se encuentra situada a los pies del edificio, en el lado del evangelio y elevada sobre un escalón circular de 22 cm de altura. Es de piedra caliza y mide un total de 90 cm de alto por 87 de diámetro. La basa mide 20 cm y tiene la mitad inferior cilíndrica lisa y la mitad superior troncocónica, decorada por tres hileras de celdillas cuadradas talladas a bisel. La copa, a la que le falta un buen trozo, es troncocónica con un roleo perimetral en la parte inferior, sobre el que se alzan diecisiete gallones que alcanzan hasta la embocadura. El interior es avenerado, con dieciocho gajos. Por las características que hemos descrito consideramos que tanto la cabecera, como los restos escultóricos dispersos, como la pila bautismal, son obras de finales del siglo XII.