Constatan que algunos cantos gregorianos resultan ser tutoriales para construir castillos o fabricar cerveza
Constatan que algunos cantos gregorianos resultan ser tutoriales para construir castillos o fabricar cerveza
Un grupo de musicólogos ha hecho un hallazgo insólito mientras analizaban un códice musical del siglo XI. Según su estudio, uno de los cantos gregorianos que hasta ahora se creía estrictamente litúrgico resulta ser, en realidad, un tutorial codificado para construir castillos.
El himno, titulado "Fortressia Magna", incluye una serie de instrucciones que, al cantarse en el orden correcto, guían paso a paso en la construcción de murallas, torres y fosos. "Es increíble cómo lograron ocultar información tan técnica en algo aparentemente espiritual", declaró la doctora en historia Paca Garte, líder del proyecto.
Para probar su hipótesis, el equipo siguió las instrucciones del canto y logró construir una maqueta de un castillo románico en miniatura con sorprendente precisión, aprovechando para ello un EXIN CASTILLOS que le había regalado Papá Noel esta Nochebuena a uno de los musicólogos. Incluso los defensores del realismo en los videojuegos medievales han empezado a plantearse incorporar este sistema de "aprendizaje musical" en sus desarrollos.
Los expertos creen que esta técnica pudo haber sido una forma de proteger secretos de ingeniería militar en una época de frecuentes conflictos. "Si los enemigos robaban los manuscritos, solo oirían un bonito canto litúrgico. Jamás sospecharían que estaban escuchando planos de ingeniería avanzados", añadió Lola Mento, otra de las autoras del estudio.
Pero, no sólo queda ahí la cosa, como continuación a sus investigaciones, descubrieron que otros manuscrutos gregorianos en realidad eran recetas secretas para elaborar cerveza. "La competencia entre las abadías por poseer los mejores tragos era brutal", según comenta Romeo Amarillo, otro de los investigadores. Es por ello que encriptaban sus mejores fórmulas para mantener en secreto sus cervezas.
No fue hasta la bula del papa Inocencio III Si bibistis, nolite expellam cuando se prohibieron estas prácticas por considerarlas contrarias al sentido litúrgico original del canto gregoriano.
