Sant Jaume de Peà
Iglesia de Sant Jaume de Peà
La iglesia de Sant Jaume de Peà, o de Pià, se encuentra en la parte occidental del término municipal de Navès, en un lugar de muy difícil acceso, al cual se llega desde la pista forestal que lleva a Besora, la cual arranca en la carretera C-26, de Solsona a Berga. Dejados atrás los desvíos de Ventolra y Marsinyac encuentra indicado Peà.
De esta iglesia, dedicada al apóstol Santiago, únicamente se sabe que fue sufragánea de la iglesia de Sant Julià dels Torrents, en el municipio de Lladurs.
Actualmente, el edificio se encuentra adosado a la rectoría, de época moderna, y en muy mal estado de conservación, con parte del ábside caído y numerosas grietas que amenazan ruina. Presenta la planimetría habitual de las modestas iglesias rurales: una sola nave rectangular y un ábside semicircular. Éste cuenta con dos ventanas de doble derrame y arco de medio punto, una en el centro y otra en el lado sur, la cual está cegada en su interior. Tanto el paramento exterior absidal, como el de los muros laterales es totalmente liso. La puerta de acceso, que se sitúa en la fachada occidental, fue realizada en una reforma posterior, al igual que el óculo que sobre ella se sitúa. Teniendo en cuenta que en el muro meridional no puede apreciarse ninguna antigua abertura tapiada, es probable que la puerta actual se ubique en el mismo lugar que lo hizo la primitiva. Remata el frontis un campanario de espadaña de doble ojo que ha perdido su mitad superior, y que también fue añadido con posterioridad.
En el interior, la nave se cubre con una bóveda de cañón mientras que el ábside lo hace con bóveda de cuarto de esfera, la cual arranca de una imposta biselada, que ha quedado en buena parte oculta por la decoración de yeso que recubre parte del templo. Enmarca el ábside un arco de mayor anchura que éste. También fue un elemento añadido en las reformas a la que fue sometido el edificio una hornacina que se abre en el muro meridional. En las mismas se incluyeron también algunas medidas para asegurar la estabilidad de la construcción, como los sillares de grandes dimensiones ubicados en los ángulos, los cuales contrastan con el aparejo original, formado por sillares un tanto irregulares de menores dimensiones, bien dispuestos en hiladas más o menos uniformes. El aparejo del ábside está mejor trabajado y escuadrado.
Por sus características, parece adecuado mantener la cronología ya propuesta por la historiografía, que sitúa Sant Jaume de Peà en el siglo xii.
Texto y foto: Montserrat Barniol López
Bibliografía
Bach i Riu, A., 1988, p. 20; Catalunya Romànica, 1984-1998, XIII, p. 197; Riu i Riu, M., 1996-1997, pp. 335-378; Riu i Riu, M., 2006-2007, p. 453; Vidal Sanvicens, M. y Vilaseca López, M., 1979, pp. 148-149.