Mare de Déu de les Agulles
Iglesia de Mare de Déu de les Agulles
Para llegar a la iglesia de Mare de Déu de les Agulles (o Aguges), desde el municipio de Montagut vamos hasta la población de Sadernes por la GIV-5231. Allí la carretera enlaza con un camino rural de acceso restringido durante la época estival, que discurre a lo largo del valle de Aguja y Riu. Seguimos esta pista hasta que, a 7 km, encontramos la indicación del sendero que lleva hasta la iglesia.
La toponimia de este lugar tiene un origen popular, por lo que no se conoce el nombre con el que fue conocida la iglesia en época medieval. Algunos documentos hablan de lugares cercanos al templo, pero desconocemos completamente la advocación o el nombre primitivo del lugar. Se conoce como de les Agulles porque el ropaje de la imagen que había en la iglesia se vestía con agujas, que las mujeres intercambian por la creencia que otorgaba buena suerte. Se conoce que antiguamente esta iglesia era sufragánea de Santa Cecilia de Sadernes.
La iglesia es de nave única, cubierta con una bóveda de cañón apuntado, y va cerrada al Este por un ábside semicircular. Las bóvedas arrancan de una moldura que recorre los muros de la nave, perfilando el extradós de las ventanas, excepto en el muro occidental. Los muros de la nave presentan una leve deformación en el tramo inmediato al ábside, de modo que lo estrechan en la unión con aquél. El ábside se abre mediante un arco triunfal apuntado de grandes dovelas bien trabajadas.
La puerta se sitúa en la fachada sur. Presenta un arco de medio punto con dovelas de buena labra, mientras que en la fachada oeste se abre una segunda puerta adintelada, con grandes sillares por montantes, que posiblemente es fruto de una reforma posterior. Sobre esta puerta hay una ventana de derrame simple, y la fachada está rematada por una espadaña de un solo vano, ligeramente descentrada respecto el eje del muro. En el costado sur se abren otras dos ventanas de diferentes tamaños, de doble derrame, del mismo tipo que la que se abre en el ábside, que es una abertura abocinada de doble derrame, con arco de medio punto monolítico.
En los muros laterales norte y sur se conserva el alero original, formado por una moldura que se desarrolla por unos dos tercios de su longitud, poco más o menos que la misma longitud que ocupa la moldura interior. El alero absidal presenta una moldura del mismo tipo que las de las fachadas laterales. Estas sobrepasan en dos hiladas los aleros primitivos, hasta el alero de la cubierta actual, que fue restaurada en la década de 1980.
La no-terminación de los aleros exteriores y de las molduras interiores hasta el extremo occidental del muro parece indicar que el sector occidental responde a una ampliación del edificio primitivo. No obstante, el aparejo no presenta una clara discontinuidad en el punto de la virtual ampliación, sino que las hiladas se prolongan sin grandes cambios. Así, los paramentos de los muros laterales son de sillares irregulares, sólo escuadrados y sin pulir, con hiladas distribuidas irregularmente con tendencia a la horizontalidad. Sólo la fachada oeste presenta un aspecto diferente, con los sillares unidos con mortero de cal, con una imagen más de enlucido. Esta continuidad ha permitido suponer que la iglesia no fue ampliada, sino que durante el transcurso de la obra se produjo un cambio en el proyecto. Entonces se eliminaron las molduras, tanto interiores como exteriores, y se sobrealzó el nivel de la cubierta. Por el contrario, sí se considera que la puerta occidental y el campanario de espadaña corresponden a reformas tardías.
Por su estructura, la iglesia coincide con a formas arquitectónicas propias del siglo xii, aunque el tipo aparejo es una pervivencia de las técnicas del siglo xi. Una asociación local, Amics de l’Alta Garrotxa, ha limpiado y consolidado el templo, que se conserva hoy en un aparente buen estado.
Virgen con el Niño
En el Museu d’Art de Girona se conserva una imagen de la Virgen que consta procedente del santuario de les Agulles (núm. inv. 35). Ingresó en esta institución en 1979 proveniente del Museo Diocesà de Girona (núm. inv. 13). Se trata de una talla policromada que mide 66,5 cm de alto x 27 cm de ancho y 26 cm de fondo. María está sentada en un sitial y apoya los pies sobre una peana muy baja, a modo de cojín. Su cara es ovalada y llena, con las mejillas carnosas, las cejas finas, la nariz corta y la boca bien proporcionada. Los extremos de sus cabellos derivan en unas ondas que le enmarcan la frente, se recogen por detrás y se tapan con un velo corto, actualmente con el color muy alterado. Este velo, tiene el borde ribeteado por unas líneas ondulantes y en el centro toma una forma de V invertida. La Madre viste una túnica roja con el cuello redondo que se decora con unos losanges en la parte inferior y forma una ondulación que deja visibles los pies calzados. Encima de la túnica hay un manto azul-verdoso que se abre en forma V a la altura del pecho. Los brazos son muy rudimentarios y posiblemente fueron añadidos tardíamente. El Niño está en el centro del regazo y su figura es también bastante elemental, con unas facciones esquemáticas. Con la mano izquierda sostiene un libro bendice y con la derecha. Viste una túnica que deja a cuerpo descubierto los pies desnudos (el derecho ha desaparecido y el izquierdo presenta una importante mutilación). Sobre la túnica viste un manto que cae en diagonal sobre las piernas.
El esquema general de la imagen sigue los cánones habituales de los ejemplares de época románica y responde al tipo de la Sedes Sapientiae o Trono de Sabiduría. Se puede observar una notable frontalidad y estatismo, aunque la Virgen parece insinuar una leve sonrisa; los pliegues laterales intentan un tímido movimiento. Presenta un mayor trabajo en la figura de María, mientras que la del Hijo es algo más rudimentaria, con pocos detalles. El grupo se rige por un visible eje de simetría y en general hay un ahorro de detalles concentrando el trabajo en la parte delantera y dejando la parte posterior casi sin trabajar. A. Noguera i Massa clasifica la imagen dentro de un conjunto de tallas que denomina del tipo “garrotxí” (de la Garrotxa), siendo la que nos ocupa uno de sus principales prototipos.
La imagen ha sido restaurada y, aunque con algunas mutilaciones, se halla en buen estado de conservación. Por los paralelismos puestos de manifiesto, ha sido fechada a finales del siglo xii. Sin embargo, creemos que la pieza presenta unas características, como el intento de naturalismo de su rostro, que permiten proponer una datación que más bien se situaría ya en la segunda mitad del siglo xiii.
Texto y Fotos: Marcos Ojosnegros Marín
Bibliografía
Borrell i Sabater, M., 2007; Catalunya Romànica, 1984-1998, IV, pp. 273-275; Montsalvatje y Fossas, F., 1889-1919, XII, XIV, XVII; Murlà i Giralt, J., 1980, pp. 155-194; Murlà i Giralt, J., 1983; Noguera Massa, A., 2008; Rius i serra, J., 1946, pp. 76, 89; Sala i Canadell, R. y Puigdevall i Diumé, N., 1977, p. 84; Sala i Canadell, R. y Puigdevall i Diumé, N., 1978, pp. 67-91.