Identificador
50172_02_070n
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
41º 17' 25.24'' -2º 6' 18.28''
Idioma
Autor
Jesús Andrés Navarro
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Monreal de Ariza
Municipio
Monreal de Ariza
Provincia
Zaragoza
Comunidad
Aragón
País
España
Claves
Descripción
Se trata de la antigua parroquia de la localidad, actualmente cerrada al culto, que se encuentra la cima de una colina rocosa, en la parte más alta del caserío, integrada dentro de los límites protegidos por el antiguo castillo. Es un verdadero conjunto religioso-militar que en su origen fue creado para defender el punto más alejado del valle del Jalón bajo dominio aragonés. Para Abbad esta iglesia, en principio, habría sido capilla de dicho castillo, aunque actualmente hace las veces de ermita, recibiendo la romería en las festividades de la localidad. El binomio compuesto por la fortaleza y la iglesia fue declarado monumento de interés artístico provincial, lo que sirvió para acometer algunas mejoras en el tejado, aunque el conjunto global del edificio necesita una mayor actuación urgentemente. Su fábrica románica ha sufrido numerosas transformaciones, como la sacristía añadida en el siglo XVI, o la ampliación de la nave, recrecida y reforzada con contrafuertes en el XVII. La vista desde el Sur proporciona una clara imagen de las modificaciones, ya que se aprecia la cabecera y el muro septentrional románicos con nitidez. En el ábside se reconoce la hilera de relleno donde estuvieron los canecillos y también la moldura que marcaba la cornisa. Se aprecian igualmente los sucesivos ensanchamientos del anteábside y la nave, así como la altura total de ambos, hasta la actual cornisilla de ladrillos aplantillados. Todo lo que queda por encima corresponde a la ampliación de época moderna. En la fachada meridional se distingue igualmente cómo toda la parte alta, el cuerpo de ventanas, pertenece a la fábrica añadida. La iglesia de la Asunción es un edificio de planta rectangular y ábside semicilíndrico orientado al Este. Las medidas de su única nave son de 23 por 9 m. El muro del ábside forma parte del lado este de la muralla, como si fuera un torreón defensivo más de la fortaleza. En él abren dos vanos de iluminación, uno centrado en el ábside y otro en el muro norte del presbiterio, y el acceso se hace mediante entrada en recodo a los pies del templo. La planta del edificio la completa una torre en su lado oeste, de planta rectangular. Se trata de un recio edificio construido en buena mampostería y sillares reforzando zonas concretas, especialmente las esquinas, como corresponde a su cometido defensivo. Interiormente la iglesia se cubre con bóveda de medio cañón con lunetos y el ábside con bóveda de cuarto de esfera, muy por encima de la altura de la nave románica. Su deteriorado estado deja ver por sus agujeros el tejado de madera a dos vertientes. En los pies de la iglesia se dispone un coro sobre bóveda de lunetos rebajada. La cabecera, compuesta por ábside y presbiterio, comparte su muro con la muralla del antiguo recinto fortificado. En el cilindro absidal abre un ventanal aspillerado, enmarcado por dos arquivoltas de medio punto y ángulo liso, con una chambrana que en su perímetro superior ha perdido parte de su estructura original, debido al vano que se abrió por encima. Al exterior, por causa del importante desnivel del terreno, queda a la altura del suelo. Otro ventanal similar a éste, salvo por los elementos decorativos a base de puntas de diamante que luce su chambrana, se dispone en el lado norte del presbiterio. La nave, profundamente transformada en el siglo XVII, aloja en su hastial la portada de acceso, realizada en piedra arenisca, con un vano de 2,23 m de luz y una anchura total de 4,40 m. Está formada por tres arquivoltas de medio punto colocadas en gradación, con baquetón simple en sus esquinas, protegidas por una chambrana con decoración geométrica de doble hilera de tacos. Apoyan en una sencilla imposta, que hace lo propio sobre dos parejas de columnas de fuste cilíndrico, con capiteles que presentan decoración intercalada de motivos vegetales y zoomórficos algo tosca y estropeada, lo que dificulta la identificación de motivos. Concretamente, el exterior del lado norte incluye figuras de aves o serpentiformes, y el interior dos niveles de tallos terminados en hojas vueltas. El interior meridional reinterpreta el tema de las aves y figuras serpentiformes combinadas con cabezas humanas en las esquinas, y el exterior recurre a hojas de palma y pencas vueltas en bolas. La interpretación de los capiteles de aves es discutida: algún autor ha visto serpientes enroscadas a figuras antropomorfas, escena que algunos identifican con la representación de Eva tentada por la serpiente. Bajo la imposta, y junto a los lados exteriores de los capiteles laterales, se disponen sendos relieve en donde se despliegan parejas de serpientes enroscadas. Esta representación serpentiforme inspiró la de la portada, algo más tardía, de la cercana iglesia de Nuestra Señora de la Ascensión de Embid de Ariza, en idéntica ubicación, aunque ejecutada de una forma más tosca. La arquivolta interior apea en montantes con baquetón de esquina. En la parte inferior de la chambrana dos cabecitas humanas en la derecha y otras dos en la izquierda, que pueden dar pistas sobre la colocación original de las conservadas en la portada de la ermita de Nuestra Señora de Allende de Moyuela. En la dovela más alta del arco de la puerta, junto al azulejo denominativo del templo, hay esculpida una cruz incisa de brazos iguales, motivo que veremos repetido en la pila bautismal del interior y que apoya la teoría popular de que el lugar fue tutelado por la orden del Temple. Existe otra puerta en el lado norte, aunque sin uso, ya que fue cegada en alguna de las reformas. Se trataba de un vano con un arco de medio punto dovelado, con jambas rectas a base de sillares, carente de decoración. El templo presenta una torre prismática adosada a los pies, que refuerza el carácter castrense de su estructura y su finalidad defensiva. Se trata de una estructura románica con remate añadido en ladrillo. Cuenta con una escalera de caracol en su interior, parcialmente a la vista debido a los derrumbes de parte de su estructura externa. Guitart la define como una torre-pórtico o campanario fortificado, con arco apuntado en su base, añadida a la iglesia románica. Volviendo al interior del edificio, en la primera capilla del lado norte se conserva una pila bautismal medieval. Se trata de una pieza monolítica, de 118 cm de diámetro, 77 cm de altura y 13 cm de grosor en su copa, con decoración en bajorrelieve a base de diez grandes viñetas cuadradas que contienen una gran cruz griega, rodeada de cuatro cruces más pequeñas de Malta. Su borde está recorrido por una moldura y la copa apoya directamente en el suelo. La combinación de una cruz de mayores dimensiones con otras cuatro que la cantonan es más habitual en época gótica que en la románica. La iglesia muy posiblemente podría ser fechada en origen en el entorno de 1200, formando parte de un románico ya avanzado, levantada con dos finalidades, completar la fortaleza defensiva de Monreal y crear una iglesia para los cristianos que repoblaran este lugar.