COLL DE NARGÓ

Iglesia de Sant Miquel de les Masies de Nargó

En kilómetro 155 de la carretera C-14, justo antes del puente que cruza el río Sallent, se toma un desvío a la izquierda, en un espacio industrial, que va a parar a una pista en mal estado, la cual, tras 4 km, llega hasta les Masies de Nargó, donde, al pie del camino, se encuentra este iglesia de la que no existen menciones de época medieval.

Se trata de un edificio que presenta una planta compuesta por una larga nave rectangular y un ábside semicircular. En el paramento exterior del ábside, cuatro lesenas determinan tres entrepaños coronados por sendas parejas de arquillos ciegos apoyados en pequeñas ménsulas triangulares. En los paños central y sur se abren dos estrechas y alargadas ventanas de derrame simple hacia el interior, coronadas por un arco de medio punto monolítico. Buena parte del lienzo absidal se asienta sobre un saliente rocoso. Una imposta biselada de piedra toba recorre la parte inferior de la cornisa. El muro septentrional fue reforzado por tres contrafuertes en talud que llegan a la mitad de su altura. Cuenta la iglesia con dos puertas de arco de medio punto situadas en los paramentos meridional y occidental. En el primero de éstos, además, se abre la tercera ventana del conjunto, que es rectangular y de doble derrame. La techumbre, de doble vertiente sobre la nave y troncocónica en el ábside, esta compuesta de planas losas de piedra.

En el interior, la nave está dividida en tres tramos por un arco fajón y otro diafragmático apoyados en pilastras, de las que las del segundo son mucho más profundas. Dos son los tipos de cubierta de la nave. Mientras que el primer tramo se cubre con una estrecha bóveda de cañón, el resto del espacio queda bajo una estructura de vigas de madera. El ábside, cubierto con la habitual bóveda de cuarto de esfera, es precedido por un arco presbiterial que facilita la transición a la mayor anchura de la nave. La presencia de los contrafuertes exteriores lleva a plantear la duda de si el edificio llegó a tener toda su nave cubierta con bóveda de cañón, que pudo derrumbarse o, incluso, ser eliminada por los problemas estructurales que provocaba.

El aparejo utilizado está formado por irregular mampostería dispuesta sin ningún tipo de uniformidad.

La construcción de este edificio se ha situado a finales del siglo xi o comienzos de la siguiente centuria. Fue restaurado, quizás en exceso, entre 1977 y 1983.

Texto: Juan Antonio Olañeta Molina/Fernando Arnó García de la Berrera - Fotos y planos: Xavier Cerqueda Ribó

Bibliografía

Catalunya Romànica, 1984-1998, VI, p. 183; Vidal Sanvicens, M. y López i Vilaseca, M., 1977, p. 81.