LA BARONIA DE RIALB

Iglesia de Sant Marc de Pallerols de Rialb

Esta ermita se encuentra camuflada en medio de un encinar en la vertiente sur del monte de Sant Marc, en la localidad de Pallerols. Para acceder al enclave, se debe tomar un camino que sale de Pallerols en dirección a la masía del Ampurdanès, para continuar, tras pasarla, durante 3 km hasta que se vislumbra a la derecha parte de la techumbre de la iglesia, que se puede llegar a confundir con una construcción normal. El tramo final se ha de realizar a pie campo a través a lo largo de unos 200 m.

Aunque no se conservan noticias documentadas de época medieval que hagan referencia al templo, seguramente la advocación a san Marcos sea posterior a la construcción del mismo, ya que el culto a dicho santo en Cataluña se extiende, sobre todo, a partir del siglo xiv. También es probable que en sus inicios, formara parte de un núcleo poblacional dependiente de la cercana localidad de Pallerols, el cual podría haber quedado despoblado durante la Baja Edad Media. Seguramente, durante la época románica se erigió una iglesia que, posteriormente, y debido a una ampliación de la misma, vio modificada la tradicional orientación de su culto, que se realizaría desde entonces mirando a Occidente. Además, de la posible eliminación del ábside, la adición de una construcción adyacente en el muro este impide conocer las características de su desaparecida cabecera.

El aparejo del liso muro sur está compuesto por sillarejo dispuesto anárquicamente, el cual contrasta con la regularidad del material utilizado en la esquina suroccidental. La única abertura de este paramento es una pequeña ventana rectangular situada en el tramo occidental. No se observa en este lienzo rastro alguno que permita situar la posible ubicación de un hipotético acceso al templo. En la fachada occidental, muy modificada a lo largo del tiempo, se observa una puerta tapiada, cuyo arco, de época moderna, está formado por grandes dovelas muy bien trabajadas. Sobre ésta, se encuentra una abertura cegada que bien podría haber tenido forma de cruz, estructura muy habitual en las fachadas occidentales de las iglesias de la Baronia de Rialb. Parte del tejado a doble vertiente, que aún conserva sus losas originales, ha desaparecido en su mitad norte. El paramento de este muro occidental se compone de sillarejo colocado irregularmente y de sillares más regulares en las dos esquinas.

A causa del desnivel del terreno, el muro norte tiene, exteriormente, una altura inferior al meridional. El tramo del mismo perteneciente al primitivo templo tiene una ventana cuadrada y tapiada, formada por tres grandes bloques de piedra irregulares. En el lado occidental de dicha abertura, una junta vertical se corresponde en el interior con el segundo tramo de la antigua nave, determinado por dos arcos fajones. El paramento de este muro es irregular tanto en su disposición, como en las características del material. La antigua iglesia tenía planta formada por una sola nave rectangular muy estrecha cubierta con bóveda de cañón con dos arcos fajones que delimitan tres tramos. El tercer arco adosado en el interior del muro este y que corresponde a la puerta de entrada, es el  antiguo arco que precedía al desaparecido ábside. De esta manera, se abrió el ábside para hacer una puerta acabada en arco de medio punto. Se observan marcadas irregularidades y deformaciones estructurales en los arcos fajones y en los paramentos interiores.

En 1983 se produjo un incendio que obligó a reconstruir parte de la techumbre de la construcción adyacente a la antigua iglesia, aunque afortunadamente, el templo románico no sufrió daño alguno.

Algunos especialistas han considerado que este edifico era prerrománico aunque la forma apuntada de la bóveda y la ausencia de opus spigatum, permiten descartar esta opción. Es probable que el edificio se erigiera durante la primera mitad del siglo xi.

Texto y fotos: Nuria Font Maco - Planos: Marc Santacreu Ortet

Bibliografía

Adell i Gisbert, J.-A., 1994, p. 264; Bach i Riu, A. y Gabriel i Forn, M., 2005, p. 142; Cataluya Romànica, 1984-1998, XVII, p. 286.