Sant Joan de Madrona
Iglesia de Sant Joan de Madrona
Al Oeste del término municipal de Madrona, y en lo alto de una elevación montañosa, se alzan los restos de la iglesia de Sant Joan, a la que se accede por la carretera de Solsona a Sant Climenç. Tras recorrer unos 16 km y dejar atrás un cruce, se llega a una pista forestal señalizada que, después de 5 km, conduce hasta Madrona. En lo alto de la montaña que se vislumbra al otro lado del torrente, al Suroeste del pueblo, se distingue una casa en ruinas junto a la que se elevan los vestigios del templo. Para llegar desde Madrona, es necesario bajar hasta el arroyo por el barranco de Sangrà y emprender a pie un camino en mal estado que en una media hora conduce a Sant Joan. Una vía alternativa pasa por la carretera de Ponts a la Seu d’Urgell, donde, pasado el kilómetro 76, una senda a la derecha sigue el valle del río hasta poco antes de llegar a Madrona, recorriendo en total unos 9 km.
Este templo, del que no se tiene ninguna noticia de época medieval, presentaba una planta compuesta por una nave rectangular y un pequeño ábside semicircular orientado a Sureste. Entre las ruinas que hoy conforman el edificio, apenas se puede intuir la bóveda de cuarto de esfera que debía de cubrir el ábside y el arranque de la de cañón de la nave. Ésta estaba reforzada por un arco fajón apuntado. Tan sólo se conserva en pie el fragmento de muro que unía este arco fajón con la puerta de entrada. En el centro del ábside se abría una ventana de doble derrame y arco de medio punto.
El aparejo utilizado en los muros laterales, formado por sillares bien trabajados y escuadrados, y dispuestos en hiladas uniformes, contrasta con la tosquedad del empleado en el ábside y en la fachada oeste. Sobre la puerta de entrada al edificio hay una inscripción con la fecha de 1759, en la que se pudo realizar dicho vano.
La construcción de este edificio puede datarse a finales del siglo xii o comienzos del xiii.
Texto: ABL
Bibliografía
Catalunya Romànica, 1984-1987, XIII, p. 242.