Pasar al contenido principal
x

Ventana conservada del antiguo ábside

Identificador
25166_03_001
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
41.971212 , 1.399349
Idioma
Autor
Francesc Rodríguez Beltrán
Colaboradores
Sin información
Edificio (Relación)

Sant Miquel de Pinell

Localidad
Pinell de Solsonès
Municipio
Pinell de Solsonès
Provincia
Lleida
Comunidad
Cataluña
País
España
Ubicación

Sant Miquel del Pinell

Descripción

Sant Miquel de Pinell

Para llegar a la iglesia de Sant Miquel desde Solsona se ha de tomar la carretera C-149 y, tras 12 km desviarse hacia la derecha para, en poco menos de 2 km, acceder a Pinell, donde se halla el templo.

 

El lugar de Pinell aparece mencionado en varios documentos del siglo x, entre ellos en uno cuya datación oscila entre 930 y 936. En 1097, la iglesia de Sant Miquel fue donada por el conde Ermengol III de Urgell a Santa Maria de Solsona. En el documento de donación se señala que el templo estaba situado ad radicem castri Pinelli. Varias son las noticias en el siglo xii lo mencionan. Así, en 1131 es citada como propietaria de un alodio del clérigo Bernat Guadall y en 1150 el papa Eugenio III la incluía entre los dominios pertenecientes a la canónica de Solsona. Cinco años más tarde, el preboste Guillem de Solsona la cedió, junto a otras, a Ramon de Albespir, aunque en 1163 vuelve a constar claramente entre las sufragáneas de Santa Maria de Solsona, en la tercera consagración de este templo. Las bulas otorgadas por Alejandro III  y Clemente III en 1180 y 1188, respectivamente, en las que se confirmaban los privilegios ofrecidos en el documento de 1150, también aludían a Sant Miquel.

 

El aspecto actual de la iglesia de Sant Miquel se aleja notablemente del que debió de tener en la época románica, pues a lo largo de los siglos ha sido objeto de importantes intervenciones. En su origen fue un edificio con una sola nave, cubierta por una bóveda de cañón levemente apuntada, y un ábside semicircular. Dado que este último fue sustituido en 1752 por el actual presbiterio rectangular –en el que se reutilizó una ventana del antiguo ábside–, la nave es el vestigio más evidente del edificio románico. El acceso se efectuaba por los pies del edificio, donde hoy subsiste una puerta del siglo xviii que sustituyó a la entrada primigenia. El templo fue ampliado en el siglo xiv por orden de Ponç de Pinell, fundador de la capellanía de Sant Antoni. La capilla de Sant Antoni fue unida al templo románico mediante una abertura practicada sobre el muro norte con un arco de grandes dimensiones.

 

Dados los escasos restos conservados y las intensas reformas realizadas, resulta complicado proponer una cronología para la construcción del edificio románico, pero el apuntamiento de la bóveda podría ser un indicio de una datación tardía.                                                        

                        Texto y foto: Francesc Rodríguez Beltrán

 

Bibliografía

 

Bach i Riu, A., 2002, pp. 302 y 437-438; Bach i Riu, A., 1996-1997, pp. 246-247; Benet i Clarà, A., 1993, pp. 17-19; Catalunya Romànica, 1984-1998, XIII, pp. 244-245; Costa i Bafarull, D., 1959, II,  pp. 641-651 y 805; Kehr, P., 1926, pp. 328-330 y 497-500; Llorens i Solé, A., 1992-1993, pp. 323-324.