ABELLA DE LA CONCA

Iglesia de Sant Vicenç de Bóixols

La iglesia parroquial dedicada a san Vicente se encuentra en el sur del pueblo de Bóixols, en una plaza que era el emplazamiento del antiguo cementerio. Se accede a esta población por la carretera L-511 que va de Isona a Coll de Nargó.

El topónimo de Bóixols aparece por primera vez en 997 en un documento de donación del conde Ermengol de Urgell a Santa Maria de la Seu d’Urgell, en el que cedía el pueblo de Sallent, al este de Boxols. Entre 1024 y 1035 el obispo Ermengol de Urgell recibe de manos del conde Ermengol II de Urgell los castillos de Abella y de Bóixols, así como sus respectivos territorios. Por su parte, la iglesia aparece documentada por primera vez, como apendicio Sancti Vicenti, en 1076. Gracias a una visita pastoral de 1758 se tiene constancia que el templo estaba en buen estado, tenía tres altares y una sacristía, aunque carecía de pilas bautismales.

El edificio, que fue manifiestamente modificado en época posterior al periodo románico, consta de una sola nave cubierta por una bóveda de cañón ligeramente apuntada y reforzada por dos arcos fajones. Éstos también son apuntados, al igual que el arco presbiteral con el que el ábside, de sección semicircular, se integra en la nave. Este último, uno de los escasos elementos originales que subsisten, se encuentra parcialmente oculto por su lado norte, y es liso en su exterior. En su centro se abre una ventana de doble derrame que, aunque es adintelada en el exterior, presenta un arco de medio punto en el interior. En el paramento sur se vislumbran los vestigios de la entrada original, actualmente cegada, formada por un arco de medio punto. El resto de elementos, como la actual entrada a poniente, la capilla sureste, la sacristía al noreste y el campanario, se construyeron en épocas posteriores. La cubierta está formada por una techumbre de losas a dos aguas. Los muros exteriores carecen de cualquier tipo de decoración.

El aparejo utilizado en los lienzos románicos está formado por sillarejo de calcárea local y piedra toba labrada en las dovelas. Se cree que el edificio fue construido a finales del siglo xii, o incluso ya iniciado el siglo xiii. Aunque, como se ha visto, ha sido objeto de una serie de reformas que han transformado sustancialmente su estructura primigenia.

Texto y fotos: Raquel Cardona Segura

Bibliografía

Catalunya Romànica, 1984-1998, XV, pp. 330-331.