Identificador
09133_01_008
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42º 31' 53.10'' , -3º 59' 2.66''
Idioma
Autor
José Luis Alonso Ortega,Pedro Luis Huerta Huerta
Colaboradores
Sin descripción
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Arenillas de Villadiego
Municipio
Villadiego
Provincia
Burgos
Comunidad
Castilla y León
País
España
Claves
Descripción
LA IGLESIA DE SAN MARTÍNOBISPO, realizada en sillería caliza, se organiza en torno a una cabecera de ábside semicircular, tramo presbiterial y nave única, con portada al mediodía y torre a los pies. De época románica son la cabecera y portada, reconstruyéndose en época tardomedieval la nave con los añadidos posteriores de la sacristía, adosada al muro sur del presbiterio, la troje, el atrio y la torre. El ábside se articula exteriormente en tres paños separados por columnas que se alzan hasta el alero, con capiteles figurados integrados en el conjunto de once canecillos que recorren el hemiciclo. Horizontalmente se organiza en tres cuerpos delimitados por líneas de imposta que enmarcan los dos vanos abiertos en el ábside, ambos siguiendo el mismo sistema constructivo: arco de medio punto que recae sobre columnas con capiteles decorados. Interiormente se cubre con bóveda de horno y aparece presidido por un retablo barroco, que oculta tras su pantalla los elementos constructivos visibles en el exterior (vanos e impostas principalmente). Un potente arco apuntado separa ábside y presbiterio, cubierto éste con cañón igualmente apuntado y calado en ambos muros por ventanas enmarcadas por impostas en las que se concentra la decoración más importante del edificio. El arco triunfal doblado y con marcado apuntamiento pone en contacto la cabecera y la nave, que salvo la estructura muraria no conserva vestigios de su pasado románico. Cronológicamente podemos distinguir al menos dos etapas constructivas. Una primera tardorrománica, de finales del siglo XII o inicios del siguiente, de la que queda visible la cabecera y los muros de la nave, con portada abierta en el muro epistolar. En siglos posteriores a la Edad Media se reconstruye el cuerpo de la nave con la apertura del baptisterio, se añade la sacristía y la troje y se levanta el cuerpo superior de la torre . Emparejado a la arquitectura, la iglesia de San Martín luce una decoración escultórica concentrada esencialmente en las columnas del ábside y del arco triunfal, en los vanos del hemiciclo y presbiterio, así como en el conjunto de canecillos que recorre toda la cabecera. En los capiteles de las columnas absidales alternan motivos geométricos a partir de trapecios, rectángulos y bolas; decoración vegetal entre rollos y representación zoomorfa de serpientes aladas. Por su parte, las cestas de las columnas que rematan el arco triunfal lucen decoración vegetal estilizada rematada con rostros humanos en el lado izquierdo, mientras que la del lado derecho muestra representaciones animalísticas (cuadrúpedos) y cabezas antropomorfas ocupando el centro y las esquinas de dicho capitel. Dos son los vanos del hemiciclo, enmarcados entre dos líneas de impostas lisas y sólo visibles al exterior. El del paño central presenta un arco moldurado con medias cañas y una chambrana cargada de motivos florales y puntos de trépanos entre ellos. El tímpano se decora con hojas puntiagudas de nervio central dispuestas de forma concéntrica. Presenta dos columnillas con capiteles en los que se representan tres sirenas de doble cola y dos parejas de grifos afrontados. Los cimacios que coronan ambas cestas se decoran con motivos vegetales. Las ventanas abiertas en ambos muros del presbiterio quedan visibles tanto al interior como al exterior. La situada en el muro del evangelio presenta exteriormente arco de medio punto abocinado enmarcado entre columnas con capiteles decorados, el izquierdo a partir de bolas con rollos y cimacio taqueado, y representaciones zoomorfas con figuras humanas el derecho. Al interior, con un intradós liso, posee dos arquivoltas decoradas con dientes de sierra y extradós con motivos de hojas de palmeta, todo ello flanqueado por dos columnillas de capiteles decorados. La cesta derecha presenta hojas de acanto rematadas con formas zoomorfas y cimacio decorado con tres filas de ajedrezado. Por su parte, el izquierdo representa dos animales afrontados, con cabeza común a ambos, y cimacio con motivos vegetales. Todo el vano aparece enmarcado por dos líneas de imposta en las que se alternan los motivos de taqueado con los vegetales de hoja de palmeta. La ventana que se abre en el muro epistolar sigue el mismo sistema constructivo de la anterior. Interiormente sólo se conservan dos de las arquivoltas, decoradas la primera con puntas de diamante y sogueado en la segunda, así como la basa con el arranque del fuste de las columnas que las sustentan. Al igual que el del muro norte se encuadra entre dos líneas de imposta decoradas con idénticos motivos. En el exterior mantiene los capiteles de las columnillas, cuyo deterioro no permite identificar los motivos elegidos para su decoración, los cimacios con motivos de red, las arquivoltas del arco decoradas la primera con puntas de clavo, quedando lisa la segunda y el extradós con dientes de sierra rematado por un fino soleado. Un alero de moldura sencilla corre a lo largo de toda la cabecera cobijando un conjunto de canecillos, once en el hemiciclo absidal y ocho en el presbiterio. Todos ellos se decoran con motivos que abarcan representaciones de cabezas antropomorfas, bolas, cilindros y molduras piramidales, siendo los más destacados en cuanto a calidad escultórica los que representan acróbatas contorsionistas. La portada, abierta en el muro sur de la iglesia, se organiza en torno a un arco apuntado con cinco arquivoltas abocinadas que descansan sobre jambas escalonadas, con decoración de semicírculos, puntas de diamante y grandes dientes de sierra.