Identificador
31283_01_003
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42º 43' 15.44'' , -2º 16' 57.88''
Idioma
Autor
Alberto Aceldegui Apesteguía
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Gastiáin
Municipio
Lana
Provincia
Navarra
Comunidad
Navarra
País
España
Claves
Descripción
LA TALLA DE NUESTRA SEÑORA DE ZUMADOYA es originaria de la ermita de su nombre, aunque en la actualidad se venere en la parroquia. La citada ermita está situada a poco más de doscientos metros de la localidad, muy cercana a la también ermita de San Miguel. Se trata de una construcción de tipo popular realizada con sillarejo, cubierta a dos aguas y una sencilla portada adintelada. Lo cierto es que debió de sufrir muchas remodelaciones desde la época de edificación, por lo que no sabemos qué aspecto tendría su fábrica románica original. La parroquia de San Saturnino es un edificio del siglo XVI muy reformado en época barroca. Concretamente la talla se sitúa en un pequeño retablillo neoclásico adosado al muro del evangelio de la iglesia. En primer lugar diremos que presenta 77 cm de altura y que sus numerosos repintes modernos dificultan su estudio. Dicho esto, la profesora Fernández-Ladreda la engloba dentro del segundo grupo de tallas derivadas de Nuestra Señora la Real de Irache, junto con las imágenes del Rocamador, Torralba e Izurzu. Concretamente Nuestra Señora de Zumadoya estaría más cercana, por su disposición, a la talla del Rocamador de la que parece, a su vez, una derivación. Como en la imagen estellica, nos encontramos que la de Zumadoya también se presenta sedente y porta a su Hijo sobre la pierna izquierda, asiéndolo con la misma mano pero, en este caso, vemos un claro paralelismo entre ambos brazos que nos lleva a pensar en una menor predisposición a la representación del movimiento por parte del artista que en el caso anterior. Esta cuestión debe tomarse como un pequeño arcaísmo, pues María ya no centra con sus brazos al Niño, y tal postura podía haberse resuelto dinamizando la posición de los brazos como se hace en la talla del Rocamador. La disposición del Niño Jesús se adapta perfectamente a lo que vemos en el resto de imágenes del mismo grupo: bendice con la diestra, en tanto que porta una bola -en otros casos es un libro- en la izquierda. Al igual que en los otros ejemplares de este mismo grupo, se suprime el manto de la Virgen y quedan tan sólo tres prendas: la túnica -con sus característicos pliegues en uve en la parte inferior y en ondas paralelas en el torso-, la sobretúnica y la toca. La orla de la sobretúnica emplea soluciones de tradición languedociana, como los encuentros en M bajo la rodilla derecha. Los pliegues de las ropas de Jesús son más sencillos. Dentro de su grupo sobresale igualmente por conservar la corona original, con adorno de pedrería y remates semicirculares; es asimismo original la esfera que porta el Niño en su mano izquierda, representativa del orbe. María se sienta en un trono complejo ya cercano a la concepción tradicional, ya que el artista añadió al clásico paralelepípedo un respaldo con el remate superior curvo. En cuanto a su cronología, dado que el modelo del que deriva el grupo se ejecutó probablemente en los años centrales del siglo XII y que la talla de Gastiáin deriva de una secuela suya, la estellesa de Rocamador, y presenta en su frente pliegues en uve con cierta plasticidad, podría situarse su ejecución en las primeras décadas del siglo XIII.