Santa Margarida de Quart
QUART
El término municipal de Quart se encuentra al Sur de la ciudad de Girona, en el margen derecho del río Onyar. Se extiende por un amplio territorio limitado por el macizo de les Gavarres, en el sector noroccidental, y la sierra de Montnegre en el sur. Los principales núcleos de población se localizan en las llanuras del río Onyar; además del pueblo de Quart, integran el municipio los agregados de Castellar de la Selva, Montnegre, Palol d’Onyar, la Creueta y Montall.
Las antiguas parroquias de este término municipal eran el centro de pequeños núcleos dispersos por el bosque. La aldea de Castellar aparece citada por primera vez en un documento del año 928; el término de Montnegre, en 998; y la villa de Quart en 1047.
La economía tradicional ha tenido siempre una base agrícola y ganadera, complementada con una activa y reputada manufactura alfarera localizada en el pueblo de Quart. Esta actividad artesana se documentada ya en el siglo xvi y tiene su origen en unos terrissers (alfareros) de Sant Dalmai, denominados terrissers negres por que producían cerámica negra o fumada (ahumada).
Iglesia de Santa Margarida
La iglesia de Santa Margarida de Quart está situada encima de una colina que se encuentra en los alrededores del núcleo urbano de Quart. La mención más antigua que conocemos de esta iglesia se remonta al año 1028. En 1279, la fabrica de Quarto aparece mencionada en el Rationes Decimarum Hispaniae y un año después se registra en el mismo volumen la fabrica ecclesie de Quarto, lo que indica que por esos años se debía estar construyendo alguna parte del edificio. La iglesia parroquial había sido posesión de la catedral de Girona y pertenecía al archidiaconado de la Selva.
El edificio original ha sido muy modificado por diversas reformas realizadas durante los siglos xvii y xviii. De la primitiva obra románica sólo se conserva un lienzo del muro de levante y el campanario, fechado entre finales del siglo xi e inicios del xii.
El campanario está situado en el lado norte de la iglesia. Se trata de una torre de planta cuadrada y cubierta a cuatro aguas que, en su parte superior, se divide en dos pisos abiertos a los cuatro vientos con parejas de ventanas geminadas. Cada vano consta de un arco de medio punto apoyado sobre columnas centrales de fuste liso y capiteles mensuliformes sin decoración. Los muros del campanario están desprovistos de ornamentación. Su aparejo es de ripio combinado con sillares de piedra caliza en los ángulos, los arcos de las ventanas y las columnas.
El campanario fue restaurado entre los años 1980 y 1983 por la Generalitat de Catalunya y la Diputación de Girona. La intervención permitió consolidar y restaurar su estructura, recuperar los vanos que se habían cegado, y reconstruir la cubierta.
Texto y fotos: Luisa Amenós Martínez – Planos: Rosa Meléndez Frigola
Bibliografía
AA.VV., 1995, p. 327-328; AA.VV., 2002, p. 704; Badia i Homs, J. y Olavarrieta i Santafè, J., 1987, pp. 180-181; Botet y Sisó, J., s.d., p. 375; Catalunya Románica, 1984-1998, V, p. 188; Montsalvatje y Fossas, F., 1889-1919, XVI, p. 144; Rius i Serra, J., 1946, I, pp. 75, 103.