Capilla del Sepulcre
Capilla del Sepulcre
La capilla del Sepulcre es el único resto conservado de un antiguo priorato de la orden del Santo Sepulcro de Jerusalén. El edificio ha quedado integrado en la masía homónima, situada muy cerca del vecindario de les Olives, a unos 4 km al noreste de Peralada. El acceso se realiza desde un desvío situado en el segundo km de la carretera GIP-6021 en dirección hacia Mollet de Peralada.
La orden militar del Santo Sepulcro tuvo en Cataluña numerosas posesiones, presididas por el monasterio de Santa Anna de Barcelona, del cual dependía directamente la comunidad de Peralada y la fecha de fundación del cual, en 1141, supone para el Sepulcre un terminus post quem. Se tiene constancia documental de su existencia desde el 1169; los textos informan de las posesiones que el priorato tenía tanto en Peralada como en Cabanes, Darnius, Espolla y Terrades, así como de la naturaleza mixta de su comunidad, vigente hasta 1435, cuando la casa barcelonesa vendió el Sepulcre al convento de carmelitas de Peralada. Las monjas mantuvieron el culto hasta la desamortización de 1836.
Los restos de la capilla se encuentran adosados al actual Mas del Sepulcre, en el sector oriental, lo cual distorsiona en gran medida la visión del conjunto. Se ha conservado la cabecera y parte de la nave original, de época románica. En origen, debió tratarse de un templo de nave única cubierta por bóveda de cañón apuntado, y cerrada por un ábside de perfil semicircular cubierto por bóveda de cuarto de esfera. Más tarde, la iglesia sufrió una transformación que se hace evidente en el sector occidental de la nave, dónde hay un cambio en las cubiertas y en la morfología de los paramentos.
En la fachada sur se ha conservado la puerta de acceso, formada por dos arcadas adoveladas de medio punto en gradación, y un tímpano liso hoy rellenado con sillares. Por encima de ella quedan dos molduras que, a juzgar por las marcas en las partes altas del ábside, podrían formar parte de un conjunto que seguía el perfil del edificio en el exterior. En esta misma fachada sur hay una ventana adovelada y de doble derrame que, junto con la ventana absidal, constituyen las dos entradas de luz originales que se conservan. El aparejo de este sector está formado por sillares de tamaño regular, bien pulidos y formando hileras horizontales. Pese a su uso actual, el Sepulcre presenta un buen estado de conservación y es un interesante testimonio de la difusión de las ordenes militares la Peralada medieval.
Texto y fotos: Margarida Muñoz Milán
Bibliografía
Badia i Homs, J., 1977-1981, II-A, pp. 335-336; Catalunya Romànica, 1984-1998, IX, pp. 620-621; Padrosa Gorgot, I. y Padern Ponsí, J., 2007, pp. 105-106.