ABELLA DE LA CONCA

Iglesia de Santa Cauberola

Los vestigios de la iglesia de Santa Cauberola, que fueron descubiertos en 1977 por Josep María Gavín i Barceló, se encuentran encaramados a unos riscos, en una zona de difícil acceso, sin señalización y cubierta por matorral, sobre el bosque de Abella, al este del poblado y en la otra parte del río. A 5 km de Isona en dirección a Abella de la Conca, un hito indica el camino hacia Bóixols por una pista sin asfaltar que pasa por debajo del templo transcurridos unos quince minutos.

No se conserva ninguna referencia documental sobre la iglesia. Se trata de una construcción de nave única bastante estrecha, que utiliza toda la superficie de la base pétrea en la que se asienta. El muro norte, que se construyó adosado a la ladera de la montaña, todavía preserva el arranque de la bóveda de cañón y los huecos de las pilastras sobre las que se apoyarían los dos arcos fajones. El muro sur tiene una altura de 1,5 m y también conserva los dos huecos correspondientes a las pilastras. Se aprecian unas hileras de aparejo regular de piedra que pertenecen al ábside, del que tan solo se conserva su inicio en el muro norte. Aunque no se ha conservado ningún vestigio de la puerta, por la posición del muro sur al borde del precipicio, debería de estar en el lado de poniente, donde hay una pared de 0,5 m, ya que es el único lugar por el que se puede acceder, no sin dificultad.

La disposición y labra del aparejo, así como la estructura interior de la edificación, permiten fechar el templo hacia el siglo xi.

Texto y fotos: Raquel Cardona Segura

Bibliografía

Aymamí i Domingo, G. y Pallarès Personat, J., 1997, pp. 14-17; Bellmunt i Figueras, J., 1998, XXXI, p. 14; Catalunya Romànica, 1984-1998, XV, p. 330.