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Torre de una de las puertas de la villa de Salás de Pallars

Identificador
25190_01_001
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42.2119844,0.932065
Idioma
Autor
David Rico Tortosa
Colaboradores
Sin información
Edificio (Relación)

Villa fortificada de Salàs de Pallars

Localidad
Salàs de Pallars
Municipio
Salàs de Pallars
Provincia
Lleida
Comunidad
Cataluña
País
España
Ubicación

Salás de Pallars

Descripción

 

SALÀS DE PALLARS

 

Salàs de Pallars es un municipio ubicado en el centro del Pallars Jussà, en la margen derecha del barranco de Fontfreda, y con el pantano de San Antonio a sus pies. A él se llega desde Lleida por la carretera C-13 en dirección nordeste tras recorrer unos 93 km.

 

Históricamente esta localidad ha tenido un protagonismo destacado dentro del condado antiguo y de la comarca. En su economía, basada en el cultivo de la vid, el olivo y los productos de la huerta, desempeñó un papel destacado la feria de ganado de pie redondo, la cual tenía su origen en un privilegio real otorgado por Pedro el Ceremonioso en 1380. La aparición de la filoxera a comienzos del mismo siglo y la construcción del pantano de San Antonio en 1916, provocaron una rápida despoblación, que se vio acentuada por la desaparición la feria de ganado en 1974.

Castillo y villa fortificada de Salàs de Pallars

Diferentes fuentes documentales señalan la existencia del castillo de Salàs con antelación a la creación de la villa, y formando parte de la segunda línea de fortificaciones fronterizas que protegían la Marca Hispánica, de los ataques de los musulmanes, situados al Sur. Así, el castillo de Salasse aparece citado por primera vez con motivo de la venta de la villa de Sensui al monasterio de Sant Genís de Bellera, hacia el año 840. Sin embargo, no será hasta 995 que se hará referencia a la villa, en una sentencia de los condes de Pallars Ramon II, Sunyer I y Borrell I, en relación a un pleito entre al abad Atón del monasterio de Bellera y los vecinos del pueblo. Dicha villa debió de tener su origen en los alrededores del castillo, como pequeño núcleo amurallado que fue creciendo progresivamente, quizás ubicado en el espacio ocupado por la actual iglesia parroquial, a la manera del vecino castillo de Talarn, o bien pudo estar emplazado en un lugar más elevado, cercano a la zona de Capdevila, desde el cual podría haber crecido hacia abajo, en dirección a dicha iglesia, con el castillo en alto, a la manera del conjunto de Sant Miquel de la Vall. En cualquier caso la ausencia de restos significativos de esta primera época, dificulta el dilucidar dicha cuestión. A partir de 1054 el castillo era uno de los más importantes del condado de Pallars, como lo evidencian la gran cantidad de acuerdos, litigios, donaciones y ventas relacionados con el mismo. Dos de los grandes protagonistas del momento fueron los condes Ramon V de Pallars Jussà y Artau I de Pallars Sobirà, familiares desavenidos que se intercambiaron en varios momentos el control del castillo y la villa de Salàs. Artau dió en prenda dicha posesión a su primo Ramon, quien a su vez la cedió a sus suegros Arnau Mir de Tost y Arsenda durante apenas tres años. Recuperado, posteriormente, por Artau I, lo dio como parte de la dote matrimonial a Llúcia, hermana de la condesa de Barcelona, junto a otros castillos como el de Peramea, Bellveí, Santa Engràcia, Toralla y Rivert. A mediados del siglo xiii, Roger vendía de la villa y la castellanía a Joan de Toralla por doce mil sueldos. Poco más tarde, Ramon de Comenge otorgaba mediante una carta de endeudamiento a favor de Guillem de Orcau la bailía del lugar y castillo de Aramunt, además de la mitad del castillo de Salás, por poco más de dos mil sueldos. Uno de los hechos más significativos de la segunda mitad del siglo xiii para la localidad fue la toma de posesión del castillo por parte del rey Pedro el Grande como consecuencia de la derrota de la revuelta nobiliaria de 1280, en la que el conde de Pallars había participado.

Las vicisitudes vividas a lo largo de los siglos explican, en buena parte, la singular configuración urbanística de la localidad. La villa de Salàs es, posiblemente, uno de los núcleos urbanos de la comarca que mejor conserva su carácter de villa medieval. Afortunadamente, Conserva un buen número de testimonios del recinto fortificado y cuenta con diferentes portales de época medieval: el de Soldevila, orientado a levante, acompañado por una espléndida torre cilíndrica muy similar a las de Talarn. En el extremo de poniente, el portal de Capdevila, en una de las posibles ubicaciones del castillo, tiene una torre que ha sido integrada en la trama urbana, con lo que ha quedando desdibujada por las edificaciones anexas. Situado al Norte, se encuentra el portal del Vall, y, en el lado sur, un pequeño y estrecho portal llamado de la Solana. El acceso a las diferentes zonas de la villa se vertebraba a partir de la plaza porticada del Mercado y de la del Forn Vell, conectadas ambas a los dos ejes viarios principales, como son las calles de Sant Pere y de Sant Cebrià de Dalt. Otras torres de planta similar a las anteriores, y que originalmente estaban dispuestas a lo largo de la antigua muralla, pueden verse en una entrada al pueblo cercana al portal del Vall, como es el caso de la de Barta, que forma parte de una vivienda y de la que se puede ver la mitad superior. Además de estas estructuras en superficie, ha subsistido un complejo sistema de galerías y pasadizos que comunicaban una gran parte del subsuelo de la población, y pasaban por las bodegas y sótanos de algunas de las casas, seguramente con la finalidad de facilitar la huída o evacuación de los habitantes en caso de ataque.

 

La construcción y ampliación, tanto del castillo como de las murallas y torres de la villa, se llevo a cabo a lo largo de un prolongado espacio de tiempo, que se podría situar entre los siglos xi y xiii.

 

Texto y fotos: David Rico Tortosa

 

Bibliografía

 

Balari i Jovany, J., 1899, p. 391; Bertran Isabal, M., 2005, pp. 95-101; Buron, V., 1989, p. 206; Castells Catalans, Els, 1967-1979, VI, pp. 1327-1331; Catalunya Romànica, 1984-1998, XV, pp. 442-443; Miquel Rosell, F., 1945-47, pp. 52-54, 124-125; Monreal y Tejada, L. y Riquer Morera, M. de, 1955-1965, p. 24; Móra i Presas, F., 1996, pp. 71-76; Pladevall i  Font, A., 1978, p. 33; Rocafort i Sansó, C., s. d., pp. 844-846; Sobrequés i Vidal, S., 1970, p. 67.