CONSTRUIDA EN MAMPOSTERÍA y sillares en las esquinas se levanta esta iglesia de planta rectangular, de una sola nave y cabecera de tres lados sustentada por el exterior con cuatro poderosos contrafuertes en forma cónica, uno de ellos oculto tras el cuerpo adosado en época posterior. En el interior del templo, junto a la puerta de entrada, en mitad de la nave, justo en el tramo anterior al coro, se conserva, anclada al suelo, la pila bautismal (106 x 80 cm). Queda estructurada en dos partes claramente diferenciadas: la superior, cilíndrica, y la inferior, esférica. La primera de ellas formada por brocal decorado con un primer cordón liso sobre una cenefa recta en la que quedan restos de inscripciones, con caracteres góticos pintados sobre la piedra, y un segundo cordón liso más marcado que el que decora el borde, que da paso a la siguiente, decorada con estrechos gajos que se juntan en la base. Guarda notables semejanzas con las pilas de la Villar del Saz de Navalón, Fuentelespino de Moya y la conservada en el interior de la iglesia de Arcas.