LA PARTICULAR OROGRAFÍA de Cercedilla debida a un emplazamiento montañoso explica la disposición de este templo en la parte alta del caserío -lugar donde se supone que estuvo el primitivo asentamiento-, con una amplia y arreglada plaza abierta en su costado meridional. Es fábrica de mampostería, moderna, a la que se accede por un pórtico que conserva un meritorio trabajo de rejería fechado en la centuria del setecientos, si bien restaurado a mediados del siglo XX. Tras haber sido trasladada desde la capilla bautismal situada a los pies, la pila de cristianar está ubicada en la actualidad en el brazo meridional del crucero del templo. Como otros ejemplos de la zona se trata de un elemento medieval, si bien ir más allá en la apreciación resulta aventurado; como elemento “románico tardío” lo presenta una placa informativa cercana, siendo esta calificación un tanto ambigua, al tiempo que generosa. Se trata de una pila realizada en piedra berroqueña, dispuesta sobre un tenante reutilizado; tanto la forma como la decoración parecen condicionadas por el material, cuyo trabajo no permite demasiadas alegrías. Su perfil es troncocónico, llenando la copa una teoría de gallones planos y de escaso bulto, ligeramente inclinados. La embocadura es del todo lisa, distinguiéndose tan sólo el perfil escalonado que marca con respecto a la parte superior de los gallones. Las medidas exteriores del vaso son 132 cm de anchura por 74 cm de altura, no considerándose su cronología anterior a la mitad del siglo XIV.