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Mocheta con cabeza humana

Identificador
49220_01_002
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
41º 18' 44.56'' , -6º 24' 3.95''
Idioma
Autor
Jaime Nuño González
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)

 

País
España
Edificio (Relación)

Ermita de La Soledad

Localidad
Fermoselle
Provincia
Zamora
Comunidad
Castilla y León
País
España
Descripción
ES ACTUALMENTE LA CAPILLA del cementerio, situada a unos cientos de metros de la localidad, hacia el sur. Fue construida en los siglos XVII o XVIII, aunque algún elemento como el arco apuntado de la nave pudiera parecer más antiguo. En el lado que comunica con el cementerio hay una puerta adintelada con dos mochetas que parecen sendos canecillos románicos con sonrientes cabecitas humanas. Por su ubicación, perfecta conservación e incluso por la propia re p resentación, parecen imitaciones de algún escultor moderno, como suele ocurrir tantas veces, sin embargo, el hecho de que ya los recoja Gómez-Moreno en su Catálogo Monumental, elaborado entre 1903 y 1905, y que ese autor los considere como románicos, pueden ser indicio de que efectivamente lo sean. Al margen de aquellos dos templos y de estos dudosos canes, algunos autores recogen presuntos elementos románicos en otra serie de edificios de la localidad. Uno de ellos es la ermita del Santo Cristo del Pino, llamada también de la Santa Cruz, que se encuentra a varios km al oeste de la villa, sobre un altozano rodeado de viñas. En este modesto edificio rectangular Gómez-Moreno describe “en su muro sur una ventana pequeñita con dos arcos de herradura, vaciados en una sola pieza, y cuyo mainel falta; los guarnece una entalladura por la haz interior”. En cuanto a la cronología de la ermita prosigue diciendo: “su obra antigua quizá date del siglo X, más pudiera también ser goda”. No sabemos qué ha podido ser de tal ventana y aunque es difícil apostillar a tan reconocido autor, más aún sin saber cómo era realmente aquella pieza, cabe decir que las ventanas dobles, incluso monolíticas, son muy abundantes en edificios civiles de los siglos XVI y XVII de todo el norte peninsular, seguramente manteniendo una tradición gótica. En todo caso lo que hoy podemos ver en esta ermita puede fecharse en torno al año 1500. Igualmente se ha dicho que la ermita de San Albín, en los arrabales del casco urbano -y donde es tradición que rezaban durante su última noche los condenados a muerte-, puede tener una cronología románica, aunque tampoco aquí vemos el menor elemento que pueda considerarse como tal, quizá excepto un sillar con marca de cantero. Una fecha en la jamba de la portada corresponde casi con total seguridad a la de la construcción de la ermita, en 1553. También en el extrarradio se levanta el Monumento a los Caídos, erigido en la posguerra, según parece con restos de una iglesia o ermita románica, aunque en ninguna de las piedras que componen esta construcción se reconocen vestigios románicos. Finalmente el Cristo de madera policromada que se conserva en la ermita de Santa Colomba se ha considerado también a veces como románico, aunque son innegables sus características góticas, de hacia finales del siglo XIII.