Sant Pere de Vilarnadal
Sant Pere de Vilarnadal
La iglesia de Sant Pere se encuentra al Suroeste del pequeño pueblo de Vilarnadal, en la vertiente meridional de la colina de Altrera. Lo cruza el arroyo del mismo nombre, afluente del Llobregat d’Empordà. El pueblo se encuentra a unos 2 kms de Masarac y se accede a él desde la carretera comarcal GIV-6026 que parte de la N-II, tomando el desvío hacia Masarac a la altura de Els Cellers.
Parece que el nombre del poblado estaría formado por el término “vilar” que en la Edad Media hacía referencia a la existencia de una casa grande, y Nadal correspondería al dueño de la misma (Vilar d’en Nadal). Todo ello estaría relacionado con el castillo que preside la población desde lo alto de una elevación. Dicho castillo, convertido en masía y todavía habitado, presenta una planta rectangular y posee sendas torres circulares y muros almenados con saeteras para armas de fuego.
La primera mención del lugar (vilare de Nadal) data de los años 1079-1091 y aparece en un documento que la enumera como una de las posesiones que el conde Hug d’Empúries cede al monasterio de Sant Quirze de Colera. De la iglesia sólo se sabe que en 1362 Sancti Petri de Villarnatallo fue sufragánea de Sant Martí de Masarac, pero a partir del siglo xvii aparece ya nombrada como parroquia independiente.
Se trata de un edificio de una nave con ábside rectangular en el exterior pero semicircular en el interior. La construcción actual data de los siglos xvii-xviii, época en que se abrió la portada adintelada sita en la fachada de poniente y se tapió la puerta original del muro meridional, que se ha reabierto hace unos años. Destacamos los relieves e inscripción que junto con el emblema del santo patrón decoran la sencilla portada barroca del siglo xvii.
De la etapa románica sólo quedan visibles parte de los muros en el interior, y en el exterior sendas ventanas de derrame en el muro sur que no son visibles desde el interior.
La construcción es a base de piedra desbastada de diversos tamaños trabada con abundante mortero. En las esquinas encontramos sillares de piedra granítica de buen tamaño y factura.
Dejamos constancia de diversos elementos que podrían pertenecer a la etapa románica. Nos referimos a un gran sillar rectangular de piedra caliza (59 x 49 x 19,5 cm) que presenta un bajo relieve con una cruz griega, patada, inscrita en un círculo de 24 cm. Se reutilizó al construir la sacristía y se puede admirar en una esquina del muro exterior de levante; en el dintel de la puerta de acceso a la iglesia también altoampurdanesa de Sant Esteve de Pedret se puede observar una cruz parecida. También en el interior del templo llama la atención el soporte del sagrario, que probablemente fue la pila de aceite.
Pila bautismal
A unos metros al Este de la iglesia, en el patio de una casa, podemos admirar la que debió ser su pila bautismal, reutilizada como jardinera. Es un bloque monolítico de piedra arenisca, de forma semiesférica, lisa, que descansa sobre un soporte circular. Todavía se aprecian los agujeros de los clavos del cierre de la tapa. La datación, al igual que la de otras pilas similares que se conservan en la comarca, se puede situar entre la segunda mitad del siglo xii e inicios del xiii. Anotamos que a la pila de Sant Feliu de Garriga, de parecidas características, se le ha dado la misma utilidad.
Texto y foto: Montse Jorba i Valero
Bibliografía
Arnall i Juan, M. J., 1981-1982, pp. 116-117; Badia i Homs, J., 1977-1981, II-A, pp. 265-270; Catalunya Romànica, 1984-1998, IX, p. 570; Gifré i Ribas, P., 2000, p. 310; Monsalvatge i Fossas, F., 1909.