Identificador
31396_03_020
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
Sin información
Idioma
Autor
Carlos Martínez Álava
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Unzué
Municipio
Unzué
Provincia
Navarra
Comunidad
Navarra
País
España
Descripción
COMO EN OTROS CASOS, el crecimiento demográfico de la población en la Edad Moderna impulsó la reforma de la iglesia parroquial, que se transforma y amplía en torno a 1562 (crucero, cabecera y cubiertas). El cuerpo de campanas fue construido un siglo después por Juan Iriarte. Todas estas intervenciones sucesivas renuevan el edificio casi totalmente, de tal forma que de su primitiva iglesia medieval sólo conserva, además de los muros perimetrales de la zona de los pies, la portada monumental abierta sobre un amplio paramento avanzado del muro sur del templo. Muestra un notable desarrollo arquitectónico y decorativo que, como veremos, la va a poner en relación, sobre todo desde el punto de vista estructural, con otras portadas de su entorno. Está formada por cuatro arquivoltas molduradas y de medio punto, más una interior baquetonada y ligeramente apuntada. La única variación del sucesivo juego de baquetones y nacelas se observa en la segunda arquivolta, que integra una faja de estrellas o puntas de diamante. Las tres centrales apean sobre tres pares de columnas acodilladas de gruesos fustes y capiteles que monopolizan el repertorio decorativo del conjunto. Todos ellos muestran temas de inspiración vegetal tratados de manera muy estilizada y esquemática. El patrón más repetido consiste en grandes hojas lisas que se vuelven en la parte superior en volutas o dejando asomar dos bolas. Todos menos el central occidental presentan dos niveles de estas hojas colocadas al tresbolillo, predominando la distribución formada por dos hojas en la parte baja y tres en la alta. Los arranques de las hojas se unen mediante combados, siguiendo ejemplos especialmente empleados y difundidos por los cenobios cistercienses (que llegan a Navarra a través de La Oliva procedentes de Santo Domingo de la Calzada). Las bolas entre volutas recuerdan a los capiteles de la portada sur de San Miguel de Estella. Los interiores del lado derecho añaden cabecitas de labra muy popular en lugar de bolas o piñas. El exterior coincide con uno de la portada de San Pedro de Echano, templo este sólo distante unos kilómetros de Unzué. Una sencilla imposta moldurada termina por asociar jambas y arquivoltas, guareciendo a los seis grandes capiteles. En consonancia con ellos, las seis basas son también de notable desarrollo y altura. Las aristas de los codillos se redondean en baquetones que culminan también en bolas o volutas semejantes a las de los capiteles, o bien en piñas. La simplificación y esquematismo de los elementos decorativos, asociados al clasicismo de su articulación arquitectónica, así como al incipiente apuntamiento del perfil del arco de ingreso, parecen situar su construcción en torno a 1200.