Sant Joan de les Abadeses
Capilla de Sant Miquel de la Infermeria
La pequeña capilla de Sant Miquel se encontraba dentro del recinto del monasterio de Sant Joan de les Abadesses, cuyas dependencias se ampliaron tras su conversión en canónica con la residencia abacial y la propia infermería, dependencia necesaria para el debido cumplimiento de la regla agustiniana. El edificio donde se acogía a las personas enfermas, así como a ancianos o desvalidos, necesitaba una capilla donde los canónigos responsables de su cuidado pudiesen celebrar el oficio diario. Los restos de dicha capilla, que fue consagrada a san Miguel, son visibles hoy en la parte trasera del palacio abacial.