LA IGLESIA PARROQUIAL de Nuestra Señora de las Nieves se sitúa en el centro de la población y se haya en ruinas, con el tejado hundido y sin puertas. Es una modesta construcción de mampostería enfoscada, formada por una sola nave y un ábside semicircular precedido de un corto tramo recto. El conjunto se completa con un pórtico moderno y una sacristía. Al exterior el ábside se presenta con características muy sencillas, careciendo de divisiones y con una ventana en el eje formada por una aspillera cobijada por un arco de medio punto enmarcado todo él por una moldura de bocel y con el alféizar decorado con una retícula incisa. En su lado sur hay un pequeño relieve tallado con entrelazos. Los muros de la cabecera culminan con una cornisa biselada que apoya sobre varios canecillos de nacela y otros decorados con distintos motivos: un tonel, una cabeza de bóvido, dos volutas y uno tipo proa de nave. En el muro de los pies del edificio se levanta una pequeña espadaña con dos troneras y remate a piñón. La portada de la iglesia se sitúa en el muro sur y es de líneas muy sencillas. Consta de un guardapolvo decorado con arquillos ciegos, una arcada doble decorada con bocel y dientes de sierra, y el arco de ingreso liso. Todo ello apoya sobre sendos cimacios decorados con ajedrezados careciendo de columnas o de cualquier otro elemento decorativo. El interior se encuentra muy transformado y en avanzado estado de ruina. No obstante, se percibe que la nave se techaba de madera y que la cabecera se cubría con bóveda de cuarto de esfera en el tramo absidal y de cañón en el presbiterio. El arco triunfal fue reconstruido en época posmedieval. Sus características constructivas y la labra de sus canecillos remiten a un románico popular que puede fecharse en torno a finales del siglo XII.