Castell de Tudela
Castillo de Tudela
El castillo de Tudela está situado en la cima de la montaña de Sant Grau, al oeste del pueblo de Sant Gregori. Para llegar a él, deberemos tomar un camino que nace en la carretera de Sant Martí de Llémena a Constantins, a la altura de les Serres. La pista forestal discurre por la línea de cresta y, tras 6 km de recorrido, llega a pie del castillo.
El castillo de Tudela aparece mencionado en los pactos y juramentos de fidelidad que la familia Montcada hizo a los condes de Barcelona entre los años 1035 y 1076. A mediados del siglo xi, Ramon, hijo de Ledgarda, juró fidelidad al conde Ramon Berenguer I por los castillos de Tudela y de Fornells. Por la misma época, su hermano Berenguer, también juró fidelidad al mismo conde pero únicamente por el castillo de Tudela. En el siglo xi, se documentan otros señores feudales con derechos sobre este castillo, como son Ramon Mir de Tudela, Arnau Guillem de Tudela y su hijo, Guillem. Entre los años 1071 y 1136, el castro de Todela aparece citado en relación a la construcción del castillo de Fornells. En este último año, el senescal Guillem Ramon de Montcada y el conde Ramon Berenguer IV pactaron por diversos castillos, entre los cuales se encuentra el de Tudela. En 1178, sus castellanos eran Pere de Tudela y su hermano Berenguer, aunque en 1183 se encontraba en poder del señor Mir d’Hostoles, feudatario seguramente de los Montcada.
El Puig de Tudela aparece citado en un capítulo de la Crònica de Bernat Desclot, una de las cuatro grandes crónicas catalanas de época medieval que narra los hechos históricos ocurridos entre el reinado de Ramon Berenguer IV y el de Pedro el Grande. En concreto, se citan los hechos ocurridos en el año 1285, a cercén de la invasión francesa. El castillo de Tudela formó parte de la dote que recibió el infante Pere cuando se casó con Guillema de Montcada en el año 1291.
Los restos del castillo de Tudela y de su capilla se encuentran en la cima del monte de Sant Grau. El conjunto de ruinas está formado por una serie de construcciones adosadas que se encuentran flanqueadas por los restos de una torre de planta circular, en el sector occidental, y de una iglesia construida en el siglo xvi, en el sector oriental. La torre tiene un diámetro interior de unos 2 m y unos muros que miden 2,2 m de grosor. Su aparejo está formado por sillares irregulares unidos con mortero de cal. El castillo debió erigirse entre finales del siglo xi e inicios del xii. En época moderna, entre la torre y la iglesia, se construyó una casa de payés que aprovechaba el piso inferior de aquélla.
Texto y foto: Luisa Amenós Martínez
Bibliografía
AA.VV., 2002, pp. 242, 248 y 708; Badia i Homs, J. y Olavarrieta i Santafè, J., 1987, p. 198; Castells Catalans, Els, 1967-1979, III, pp. 282-287; Catalunya Románica, 1984-1998, V, p. 199; Del Campo i Jordà, F., 1991, pp. 102-103; Mallorquí Garcia, E., 2007a, p. 463; Oliva i Prat, M., 1967, p. 59.