Identificador
19257_12_008n
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
41º 5' 54.11'' , -2º 34' 26.23''
Idioma
Autor
Ana Belén Fernández Martínez,Ezequiel Jimeno Martínez
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Guijosa
Municipio
Sigüenza
Provincia
Guadalajara
Comunidad
Castilla-La Mancha
País
España
Claves
Descripción
EN LA PARTE INTERMEDIA DEL PUEBLO, hacia el Este, cerca de la plaza y del castillo, se encuentra la primitiva iglesia románica, de la que solamente la traza inicial nos puede indicar su origen arquitectónico. Se trata de una iglesia de reminiscencias románicas, aunque muy variada en su construcción posterior, con diferentes remodelaciones a lo largo de su historia. Las más relevantes hechas a partir del siglo XVI, como ocurre en la mayoría de las iglesias que pertenecieron al obispado seguntino: Alcuneza, Alboreca, Palazuelos y Pozancos, entre otras. Destaca su sólida construcción con contrafuertes adosados a los muros, fábrica de sillería y mampostería que recuerda a otras construcciones cercanas. Consta de una sola nave que iguala en volumen con la cabecera cuadrada, típica de las modificaciones que se hicieron en el siglo XVI, con espadaña a los pies y portada en el muro sur. La portada, cobijada bajo un pórtico saliente del muro, nos muestra el desnivel del terreno para acceder al interior mediante unos escalones. La portada se resuelve mediante un arco de medio punto moldurado y decorado con rosetas que bajan hasta el suelo. Se aprecia claramente que no es románica, sino que fue modificada en la época de la ampliación y decorada con motivos florales de estética renacentista. A lo largo del muro de la epístola vemos la disposición del pórtico y de tres contrafuertes adosados a la nave, sobreelevada en altura. Aprovechando esa elevación se abrió un óculo clásico que, junto con otro vano aspillerado, da iluminación al interior. La espadaña, situada a los pies, es quizás el elemento de connotaciones románicas más clarificador que nos puede ofrecer la iglesia de su primitiva construcción, ya que el resto fue modificado por completo. Se concibe como un elemento único al que se le adosa un grueso contrafuerte en su cara anterior para continuar con el dibujo de la nave. Fue modificada tras la ampliación de la iglesia, pero conserva la fábrica original de sillares robustos, como suele ser habitual en este tipo de construcciones. Se divide en dos cuerpos, el primero de ellos supera la altura de la nave y se delimita con una sencilla imposta moldurada. El segundo alberga el cuerpo de campanas, con dos huecos de medio punto, rematado en forma triangular, al que se le añadió en otra actuación posterior un pequeño campanil en lo más alto. Al interior, la iglesia llama la atención por la solución arquitectónica adoptada para la cubierta tras su reforma del siglo XVI. Una impresionante bóveda de crucería con terceletes de influencias góticas se alza en la cabecera, de bella factura, lo que nos indica que las directrices que marcó el obispado seguntino en la época para la reforma de las anticuadas iglesias románicas se cumplieron en la mayoría de estos pequeños y austeros templos. El retablo que ocupa el altar mayor, de grandes dimensiones, nos da una idea sobre el alcance del cambio, partiendo del minúsculo ábside románico. En el resto de la nave, la cubierta sigue el mismo modelo que en la cabecera, con bóveda de crucería, separada en sus tres tramos por arcos de medio punto ligeramente apuntados, que descansa en columnas, excepto en el caso del arco triunfal, que lo hace sobre pilastras planas adosadas al muro, con decoración de rosetas idénticas a las que decoran la portada exterior de ingreso, lo que nos indica que todo el conjunto se realizó en una misma época y estilo. El coro se sitúa en la parte occidental, con una baranda de estructura de madera y con pequeñas ménsulas bajo el alero, similar a otras iglesias de la época. En la parte inferior se encuentra la pila bautismal, no original románica, sino una adaptación de otra época posterior, muy simple, con fuste estrecho y superficie de la copa con forma geométrica que se recorre por un grueso cordón horizontal en su parte central.