CASTELL DE MUR

Iglesia de Santa Llúcia de Mur

Desde Guàrdia de Noguera por la carretera LV-9124 que conduce al castillo de Mur, a mitad de camino se alcanza la población de Santa Llúcia. La iglesia, queda situada en la parte derecha del pueblo bajando unos escalones desde la primera casa que del núcleo principal. 

Bajo la jurisdicción señorial de Mur y regida por su pabordato, existe constancia documental de la iglesia desde que en 1094 los condes de Pallars  Jussà, Ramon V y Valença, hicieron entrega al monasterio benedictino de Santa Maria de Lavaix de la iglesia dedicada san Julián, san Cipriano y santa Lucía, junto con todas sus pertenencias. Casi una centuria después, en 1162, Santa Llúcia gozaba de la condición de priorato bajo la dependencia de la canónica de Santa Maria de Mur. Es necesario esperar a las décimas papales de 1279 y 1280 para volver a tener referencias documentales de este templo, en las cuales Santa Llúcia de Mur aparece incluida al decanato de Tremp.

Conservada en muy buen estado, dado que el último proceso de restauración se llevó a cabo durante el 2001, se trata de un edificio de una sola nave cubierta con bóveda de cañón de perfil apuntado. La iglesia aparece encastrada a una construcción anexa, por lo que no es posible rodear los muros exteriores, ni por levante ni por la parte septentrional. El paramento situado a poniente muestra evidencias claras de haber sido reconstruido. Situado en la parte suroeste se observan restos de un muro pertenecientes a la antigua iglesia. En la fachada sur se distingue claramente el sillarejo original del añadido con posterioridad. En su parte más oriental se aprecian los restos de una puerta cegada, que posiblemente era la entrada primitiva. 

Se accede al templo mediante una puerta, de factura posterior, situada en la fachada oeste y resuelta, al exterior, mediante un arco de medio punto, y al interior con un arco escarzado. En la jamba sur se ha utilizado un alargado sillar colocado en posición vertical. La fachada está coronada por un campanario de espadaña de dos ojos realizado en un aparejo diferente al resto del conjunto, mejor trabajado y escuadrado, debajo del cual se abre un óculo. Toda la fachada oeste presenta claras evidencias de haber sido reformada de en su integridad.

En el interior del templo la bóveda de cañón que cubre la nave está sustentada por un arco fajón apuntado que divide el espacio en dos tramos. La cabecera, de planta rectangular, se cubre, a su vez, con bóveda con lunetos laterales y está enmarcada por un arco triunfal. La bóveda, totalmente enlucida, está separada de los muros de piedra vista mediante una moldura biselada. En el lado del Evangelio se encuentran una capilla y una sacristía modernas.

El aparejo utilizado está formado por sillarejo de tamaño medio y mal escuadrado. Las características de los vestigios románicos conservados permiten datarlos en el siglo xiii.

Procedentes de esta iglesia, se conservan en el Museu Nacional d’Art de Catalunya en Barcelona dos tablas pintadas que representan el martirio al que fue sometida santa Lucía tras rechazar a su prometido y entregar su vida a Cristo, y que se suelen datar entre finales del siglo xiii o comienzos del xiv.

                                                                                                                                         Texto y fotos: David Antonio Rico

Bibliografía

Bochaca i Tohà, M. P., Portet i Boixareu, C. y Puig i Andreu, R., 1991, pp.18-33; Catalunya Romànica, 1984-1998, XV, pp.364-365; Vidal Sanvicens, M. y López i Vilaseca, M., 1994, pp. 252-253.