Sant Mateu de Valldevià
Iglesia de Sant Mateu de Valldevià
Valldevià es un pequeño pueblo situado en el extremo norte del término de Vilopriu, en el sector de colinas que separan los cursos de los ríos Ter y Fluvià. Consta de un conjunto disperso de caseríos cuyo núcleo se agrupa alrededor de la iglesia de Sant Mateu. La carretera GI-631, que lleva de Colomers a Sant Mori –pasando por Vilopriu– transcurre por las inmediaciones del templo.
El lugar, que formó parte del término del castillo de Verges y posteriormente de la bailía real del mismo, es identificado con Cacavianus, una villa en posesión de la mitra de Girona documentada en varios preceptos carolingios de los siglos ix y x. El topónimo aparece en el acta de consagración de la iglesia del monasterio de Sant Miquel de Fluvià, del año 1066, donde se menciona que la villa Cacavitem limita, al Sur, con Vilopriu. La iglesia, dedicada a san Mateo, parece documentarse por primera vez en el año 1278. Probablemente siempre ha sido sufragánea de Sant Pere de Vilopriu, pese a la secular reticencia de sus vecinos que, ya en el siglo xiv, se negaban a contribuir en los gastos de la susodicha parroquial.
La iglesia Valldevià es en una construcción de reducidas dimensiones, de una sola nave con cabecera de planta semicircular, que en el exterior queda parcialmente oculta por dos construcciones añadidas en época moderna, la sacristía en el costado sur, y una rectoría en el norte. Estas alteraciones posteriores también comportaron la anulación de una ventana cuyos montantes y arco de medio punto aparecen tapiados en el centro del ábside. Sobre el dintel de la puerta de entrada, abierta en el muro sur (donde se encuentra el antiguo cementerio), quedan las dovelas de un arco de descarga por encima del cual se levanta un nivel superior en el que aparecen dos pequeñas aberturas cuadrangulares.
La fachada occidental de la iglesia fue rehecha después de
Por el interior, Sant Mateu presenta una cubierta en bóveda de arista totalmente encalada (al contrario que los muros, que se han dejado recientemente a piedra vista), con arco fajón ligeramente apuntado apoyado sobre impostas en gola. Un arco triunfal de medio punto separa la nave y el ábside, y dos hornacinas se abren en la parte posterior de la nave, mientras parece adivinarse una tercera, actualmente tapiada.
La fábrica revela bien las diversas obras y refacciones a las que se ha visto sometido el edificio con el paso de los siglos, y la pluralidad morfológica del paramento podría asociarse a distintas fases constructivas. La sillería dispuesta en hiladas regulares del muro septentrional y de la parte norte de la cabecera correspondería a una construcción primitiva que debe fecharse entre los siglos xii y xiii, considerándose coetáneas las dos arcadas que sustentan la bóveda. El resto de muros y elementos, edificados con un aparejo de mampostería ordinaria, son ya parte de las reformas llevadas a cabo en la iglesia en épocas posteriores, parece que en dos etapas distintas, la primera entre los siglos xvi-xvii, la segunda ya en los siglos xvii y xix
Texto y fotos: Ana Victoria Paul Martínez
Bibliografía
Catalunya Romànica, 1989, VIII, pp. 348; Marquès i Planagumà, J. M., 1995a, pp. 405-446; Marquès i Planagumà, J. M., 1996a, pp. 35-67