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Detalle del muro hastial

Identificador
31481_01_080
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
Sin información
Idioma
Autor
Julia Baldó Alcoz
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)

 

País
España
Edificio (Relación)

Ermita de Santa Colomba

Localidad
Meoz / Meotz
Municipio
Lónguida / Longida
Provincia
Navarra
Comunidad
Navarra
País
España
Descripción
EMPLAZADA EN LAS AFUERAS DEL PUEBLO, esta ermita se sitúa en un altozano rodeado de pequeñas colinas desde el que se divisa una amplia panorámica del valle y de los montes circundantes. A ella se puede acceder caminando desde la carretera local de entrada al pueblo. El exterior del templo se caracteriza por poseer un cuerpo compacto construido a base de sillarejo, del que se destaca el ábside, dos contrafuertes (uno en el Norte y otro en el Sur) que marcan la separación entre cabecera y nave, un porche cerrado de aparejo descuidado, adosado posteriormente al lado sur (al que se accede por una puerta de piedra adintelada con ménsulas lisas y en cuyo interior se construyó una vivienda elevada que alojaba a un ermitaño) y una espadaña en el vértice oeste del tejado. En el interior colocaron tirantes para evitar el derrumbe de muros y bóvedas. A los pies se emplaza el cementerio, en el que todavía se da sepultura a los vecinos de la población. Como vanos visibles se pueden enumerar el abierto en el muro oeste, cuadrado y posmedieval, y una pequeña ventana ubicada en el eje del ábside, con remate de medio punto con decoración incisa y lados achaflanados. Otras dos aberturas saeteras achaflanadas, con terminación semicircular, se distribuyen a lo largo del muro sur y sólo son perceptibles una vez que se ha ingresado el cuerpo meridional. El tejado reposa sobre una hilera de canecillos repartidos a lo largo del perímetro superior del ábside y del muro septentrional. Los que se observan en el primero alternan diseños convexos lisos con otros decorados por series de rollos lisos o moldurados y bandas con motivos estriados o taqueados. Mientras que los que se encuentran en el Norte combinan diferentes trazas cóncavas y convexas, ángulos rectos y motivos diversos que asemejan barriles o figuras humanas, por ejemplo. Es posible que su flanco sur también estuviese recorrido por canecillos similares, si bien no se pueden percibir a simple vista debido a que el porche oculta la línea del tejaroz. El muro sur del edificio románico queda resguardado en el interior del cuerpo meridional. La portada (de 90 cm de anchura de vano, 1,93 m de frente y 1,11 m de fondo) consta de un arco de medio punto, delimitado por molduras en doble bisel y rematado por una chambrana, que enmarca un tímpano apoyado en ménsulas de cuatro rollos dentro de un recuadro sogueado con restos de policromía. El conjunto apea sobre sendos pies derechos. El tímpano queda inscrito en una moldura semicircular que muestra restos de la policromía rojiza original. En su centro luce un crismón trinitario con el tradicional esquema de seis travesaños y las letras P con una pequeña cruz en su palo inferior, S invertida, Alfa y Omega. En el cuerpo meridional, justo a la derecha de la puerta de ingreso al templo, se ubica un sepulcro compuesto por un gran bloque de piedra rectangular con forma antropomorfa, que se apoya sobre un doble pedestal. La lápida que lo cubre, de forma trapezoidal, está adornada por dos molduras perimetrales de gran calidad que encierran una gran cruz con travesaños superior (floronado) e inferior (ensanchado). Sus medidas son de 53 cm de altura (incluida la tapa), 66 cm de anchura en su frente delantero y 45 cm en el trasero, y 204 cm de longitud. Al interior, la iglesia se compone de nave única (con una longitud aproximada de 11 m y una anchura de 3,85 m), dividida en tres tramos que terminan en una cabecera semicircular que se corona con bóveda de horno. La nave se cubre con bóveda de medio cañón secuenciada mediante arcos fajones que apean sobre pilastras (de 50 cm de anchura y 25 cm de fondo) terminadas en cimacios lisos. Estos coinciden en altura y morfología con la moldura de imposta lisa que recorre el perímetro de la nave. A los pies, en el tramo occidental, se ha construido un pequeño coro de madera. En cuanto a los vanos, debe citarse la presencia de cuatro ventanas distribuidas de la siguiente forma: una en el ábside, dos en el muro sur (en el anteábside y en el coro) y otra en el hastial, de factura más reciente. Las originales son abocinadas. Dos pequeñas hornacinas se abren en el lienzo inferior sur del anteábside. Merece la pena señalar la existencia de restos de policromía original en algunos lienzos, siendo los más evidentes y mejor conservados los que se localizan en el Norte, justo encima de la escalera de acceso al coro, consistiendo en encintados de color rojizo sobre las juntas. En el sotocoro, orientada hacia el muro norte, se emplaza una pila bautismal de sencillo diseño. La taza está formada por un bloque semiesférico de piedra sin ninguna decoración y se apoya directamente sobre un pedestal cuadrangular policromado en rojo. A su lado, puede hallarse un pedestal de piedra, de líneas redondeadas, del que se desconoce su procedencia y función. Finalmente, debe indicarse que todas estas características proporcionan una datación de la iglesia en la segunda mitad del siglo XII.