OLIANA
Iglesia de Sant Gili de Eroles
Esta iglesia está situada en la ladera sureste del cerro de la Creu, medio escondido entre la maleza, cerca de la masía de Eroles, a unos 7 km de Oliana por la pista que lleva a la antigua aldea de les Anoves. No se han conservado noticias de época medieval sobre el templo, el cual ha sido muy modificado. Presenta una estructura muy sencilla, con una planta compuesta por una nave rectangular y un ábside semicircular levemente ultrapasado, precedido por un corto espacio presbiterial. El paramento exterior absidal es liso, cuenta con dos ventanas, una, en el centro, de doble derrame y actualmente tapiada, y otra, trapezoidal, minúscula y de derrame simple, en el lado sur. Está coronado por una moldura biselada que carece de ornamentación. La techumbre de la cabecera es plana e inclinada, y posiblemente sustituyó a la habitual cubierta cónica durante algunas reformas en las cuales se debió de reducir la altura del ábside. En el curso de las mismas, quizás provocadas por el derrumbe de parte de las bóvedas, también se transformó profundamente el muro norte, que es sustancialmente más estrecho que el meridional y que no sobresale exteriormente respeto al nivel de la cabecera, sino que sucede lo contrario. El muro meridional es liso, y en él se abren otras dos ventanas, una de doble derrame y otra, en el extremo occidental, rectangular y de factura moderna. Protege la puerta un porche con un potente arco de entrada y coronado por una sencilla espadaña, el cual fue adosado a la fachada occidental en época posterior.
En el interior, la nave está cubierta por una bóveda de cañón reforzada por dos arcos fajones que delimitan tres tramos. Por su parte, en el ábside se sustituyó la habitual bóveda de cuarto de esfera, que debió de venirse abajo ‒quizás conjuntamente con la de la nave‒, por un envigado inclinado de madera plano. El hemiciclo absidal quedó separado del resto del templo por un tabique, con lo que pasó a desempeñar la función de sacristía.
Mientras que el aparejo utilizado en el ábside está formado por tosco sillarejo alargado y de buen tamaño, colocado en hiladas uniformes, en el resto de muros el material es todavía más irregular.
Aunque resulta difícil la datación de este edificio, fundamentalmente por las profundas transformaciones sufridas, se ha situado su construcción en el siglo xii.
Texto: Juan Antonio Olañeta Molina/Roser Gort Riera - Foto: Roser Gort Riera
Bibliografía
Baraut i Obiols, C., 1981, pp.58-59; Catalunya Romànica, 1984-1998, VI, p. 269.