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Vista general de la fachada oeste de Sant Pere de Montagut

Identificador
17109_01_003
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42.2301671,2.5943044
Idioma
Autor
Marcos Ojosnegros Marín
Colaboradores
Sin información
Edificio (Relación)

Sant Pere de Montagut

Localidad
Montagut
Municipio
Montagut i Oix
Provincia
Girona
Comunidad
Cataluña
País
España
Ubicación

Sant Pere de Montagut

Descripción

Iglesia de Sant Pere de Montagut

 

La iglesia parroquial de Sant Pere se encuentra en el centro de Montagut, en una pequeña plaza. Se llega fácilmente, desde la carretera (GIV-5232), por la calle de la Font, que se convierte luego en la calle d’Olot.

 

El lugar de Montagut aparece ya en un precepto de Carlos el Simple del año 898, mientras que la circunscripción parroquial de sancti Petri de Monte Acuto se menciona en una donación del conde Sunifred II de Besalú-Cerdanya al monasterio de Sant Pere de Camprodon. La iglesia, en concreto, se cita en el año 1003, en una descripción que solicitó el obispo de Ot de Girona al conde Bernat Tallaferro de Besalú; en ella le solicita que declare judicialmente no tener derechos sobre las iglesias de Sant Pere de Besalú y Sant Feliu de Beuda. En 1019, en la institución de la canónica de Girona por parte del obispo Pere Roger, la iglesia de Sant Pere aparece entre las propiedades de la dotación. En los testamentos de Ramon de Vilafedante (1193) y de Pere de Cervera (1195) se hacen donaciones a la iglesia de Montagut. En 1372, el rey Pedro el Ceremonioso vendió los derechos de bovaje de diversas parroquias y castillos del condado de Besalú, entre las que se encuentra Sant Pere de Montagut, para afrontar los gastos de la guerra de Cerdeña. El templo se arruinó en el terremoto de 1428, que arrasó parte de los edificios de la Garrotxa.

 

La iglesia de Sant Pere de Montagut es un edificio de planta basilical de tres naves, cuyas estructuras han sido objeto de notables transformaciones, lo que se manifiesta claramente en su aspecto actual. A Oriente se cierra con tres ábsides, aunque solo el central tiene proyección exterior. Dicho ábside y la nave mayor se conectan por un doble arco triunfal en gradación. La nave central está cubierta con una bóveda apuntada que arranca de una cornisa que se prolonga luego en el muro de la cabecera (en el ábside la reposa sobre un pequeño entablamento sostenido por ménsulas, entre las que hay restos de un friso de dientes de sierra), mientras que las naves laterales, más estrechas, cubren con bóveda de cañón. Las naves se comunican mediante tres arcos formeros en cada lado, que arrancan de pilares de sección rectangular sobre podio (los de los extremos reposan sobre una pilastra adosada al arco triunfal y sobre el muro perimetral del frontis), decorados con una moldura.

 

En el edificio se abren numerosas ventanas. En el ábside central encontramos una ventana abocinada, mientras que en cada uno de los ábsides laterales hay una pequeña saetera de doble derrame y dintel monolítico, cegadas. Por otra parte, en el muro norte de la nave central hay otras dos ventanas de derrame simple y dintel monolítico, igualmente cegadas. Otras dos grandes ventanas de doble derrame se abren en la nave sur, y sustituyen las practicadas en el muro del interior de la nave central.

 

El acceso al templo se sitúa en la fachada oeste. Presenta una portada con un coronamiento de corte clasicista, fechada por inscripción en 1669. Por encima de la portada hay rosetón, probablemente del mismo momento. A ambos lados del rosetón hay otras dos ventanas en arco de medio punto, asociadas a un muro de mampostería basta y con gran cantidad de argamasa. Bajo la actual torre hay unos paños de pared correspondientes a un anterior campanario del que pueden distinguirse los sillares y los vanos con dobles arcos de medio punto, al menos en dos de las cuatro caras.

 

En el exterior, la fachada norte permite reconocer sucesivas fases constructivas, que vienen representadas por diferentes tipos de paramento. En unas reformas de la plaza se rebajó el nivel del suelo, lo que dejó al descubierto parte de los cimientos. Por encima aparecen algunas hiladas del paramento del muro, de sillares grandes y bien labrados (el mismo que veíamos en la cabecera). Por encima se convierte en un muro de sillarejo de poca labra dispuesto en hiladas irregulares (tipo que también podemos observar en las fachadas sur y oeste). El nivel superior es un espacio que en las fachadas norte y sur crea una galería de arcos y una nueva cubierta. También en el lado este, que aparece parcialmente oculto por la sacristía, se aprecian tramos de los muros más antiguos en la parte baja, con el mismo tipo de aparejo de grandes sillares bien labrados de roca caliza dispuestos en hiladas a soga y tizón. Debido a todas estas modificaciones es difícil imaginar el estado original de la construcción. Con todo, se considera que el edificio tenía una planta basilical, y se ha relacionado con otros templos de la región como Sant Vicenç de Besalú o Sant Feliu de Beuda.

 

Se cree que el trabajo en hierro de la puerta podría corresponder al siglo xii o xiii. Asimismo, en el interior del edificio se conservan dos pilas de agua bendita, una de las cuales presenta decoración con arquería ciega y lesenas. También hay una pila bautismal en la que todo el perfil de la copa se decora con cabezas de personajes coronados. La cronología de estos elementos es difícil de precisar.

 

 

Texto: Marcos Ojosnegros Marín – Fotos: Marcos Ojosnegros Marín – Francesc Xavier Llagostera Gelis – Planos: Francesc Xavier Llagostera Gelis

 

 

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