Pasar al contenido principal
x

Fachada meridional de Sant Cebrià dels Alls

Identificador
17901_07_001
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
41.887316, 3.014459
Idioma
Autor
Ana Victoria Paul Martínez
Colaboradores
Sin información
Edificio (Relación)

Sant Cebrià dels Alls

Localidad
Sant Cebrià dels Alls
Municipio
Cruïlles, Monells i Sant Sadurni de l' Heura
Provincia
Girona
Comunidad
Cataluña
País
España
Ubicación

Sant Cebrià dels Alls

Descripción

Iglesia de Sant Cebrià dels Alls

 

Conocido también con el nombre de Camós de les Gavarres, Sant Cebrià dels Alls se sitúa en las laderas orientales del Puig d’Arques, en el macizo de las Gavarres, en un área perteneciente al Plan de Espacios de Interés Natural (PEIN). El conjunto lo forman la iglesia, la antigua rectoría y un caserío conocido como el castillo de Camós, que se emplazan en un lugar privilegiado bajo el que se extienden las vertientes meridionales de la sierra y la costa de Calonge y Palamós. Existen varias posibilidades para acceder al lugar. Posiblemente la más adecuada para llegar en coche sea por el coll de la Ganga (GI-660) que lleva de la Bisbal d’Empordà a Calonge; entre los km 9 y 10 se debe girar por una pista forestal marcada a la derecha, que se debe continuar siguiendo las señales verdes de BTT, pasando por dos caseríos en ruinas (Cal Alenyà y Can Vergeli).

 

Los asentamientos humanos de las Gavarres responden a la evolución del modelo carolingio que se estableció en dicho territorio durante los siglos ix y x, por ello, las residencias corresponden a una serie de viviendas rurales diseminadas organizadas en torno a un centro cultual, que solía dar nombre al lugar. El testamento del capiscol Ponç, fechado en 1064, hace mención por vez primera a la parroquia de Sancti Cipriani de Alios. Treinta años más tarde, la condesa Ermessenda de Barcelona-Girona cedió unos terrenos de esta parroquia al monasterio de Sant Feliu de Guíxols y, poco después, en 1102, el lugar vuelve a ser documentado cuando el clérigo Berenguer Amat dona las antiguas posesiones del capiscol Ponç, su tío, a la canónica gerundense.

 

La iglesia de Sant Cebrià dels Alls ha ido desarrollándose paralelamente a la aldea homónima. En el siglo xix, a causa de la formación de los municipios –con sede en poblaciones situadas en la plana–, tanto esta parroquia como sus compañeras quedaron relegadas a un segundo nivel, quedando prácticamente abandonadas. Sant Cebrià dels Alls pasó a formar parte del municipio de Cruïlles, en 1936 dejó de tener rector y en 1955 dejó funcionar como parroquia, siendo desacralizada e iniciándose su proceso de ruina y expoliación. En 1992, un particular compró el conjunto al obispado de Girona que, diez años más tarde, firmó un convenio con el Consorci de les Gavarres con tal de intervenir y restaurar el elemento patrimonial.

 

La iglesia de Sant Cebrià dels Alls es de planta rectangular, sin ábside diferenciado. La nave está cubierta por una bóveda de cañón seguido, ligeramente apuntada. Entre la cabecera y el presbiterio no existe otra diferenciación que una pequeña elevación del nivel del suelo de la primera. Las paredes interiores están encaladas, y los vestigios de pintura añil predominan en las zonas superiores y la cubierta, apareciendo algunos restos pictóricos en determinados sectores –bastante deteriorados por las filtraciones y la humedad–, entre los que se encuentran cruces de consagración en la zona del ábside, dónde se abre una ventana abocinada y dos hornacinas, demasiado altas para ser credencias. En los muros norte y sur hay dos capillas laterales añadidas, así como una sacristía también agregada, y en el lienzo occidental se encuentran adosadas unas escaleras de acceso al coro y un banco corrido.

 

La entrada al templo se efectúa por la fachada meridional, donde destaca una puerta de arco de medio punto adovelado sobre la que se alza un campanario de espadaña aparentemente inacabado, al que se subía por unas escaleras exteriores de las que quedan unos pocos vestigios. En el costado norte del edificio hay un contrafuerte que corrige el desnivel del terreno, y al muro occidental se adosa el manso conocido como castell de Camós, que a su vez se adosa a la rectoría. El aparato constructivo de los muros exteriores consta de sillería de granito escuadrado de medida mediana y grande, dispuesta en regulares hileras.

 

Los resultados de varios procesos de intervención arqueológica del templo de Sant Cebrià dels Alls permiten conocer la evolución del edificio, además de proporcionar una serie de materiales numismáticos de cierto interés. Con respecto a la arquitectura, se han identificado tres fases de construcción del templo: a la primera corresponden los cimientos de un edificio pre-románico de ábside trapezoidal, situado cronológicamente entre los siglos viii y ix; de una segunda etapa quedan restos de una cabecera románica semicircular, que data del siglo xi; por último, la iglesia actual pertenece a una tercera fase constructiva, perteneciente a la tipología del románico tardío de los siglos xii-xiii. La consolidación de las capillas laterales y la sacristía corresponde a una ampliación a la que se sometió la iglesia entre los siglos xvii y xviii.

 

 

Herrajes de la puerta

 

Los batientes de la puerta de entrada del templo de Sant Cebrià, junto con los vestigios de unos bancos de madera con inscripciones y una campana del xvi, se conservan en el interior de la cercana iglesia de Sant Martí de Romanyà de la Selva, en la misma comarca del Baix Empordà. Se trata de dos tablas de madera trabajadas con unas piezas de hierro forjado, que consisten en cuatro charnelas, cinco barras ornamentadas que unen la madera y, finalmente, el cerrojo, cuya utilidad principal es consolidar los tablones y garantizar un cierre efectivo. Cabe destacar la decoración configurada por dichos elementos, que constan de unas piezas largas de hierro clavadas, en cuyos extremos despliegan dos volutas simétricas, sobre y bajo las que aparecen una serie de espirales de menor tamaño opuestas dispuestas en horizontal y sostenidas a la madera mediante clavos. El cerrojo se encuentra sobre el batiente derecho, y consta de una barra posicionada perpendicularmente al picaporte, que la sujeta al mecanismo mediante una argolla.

 

Por las características decorativas, la antigua puerta de Sant Cebrià dels Alls puede considerarse una obra de los siglos xii y xiii, momento de madurez de la industria de producción del hierro; la presencia de dos tipologías de llave permite suponer que la puerta fue reforzada con posterioridad. El sencillo ornamento de los batientes tiene similitudes con el de la reja de ventana procedente, probablemente, del ábside de Sant Miquel de Cruïlles, conservada entre el Museo Episcopal de Vic y el Museo Cau Ferrat de Sitjes.

 

Texto y fotos: ANA VICTORIA PAUL MARTÍNEZ

 

 

Bibliografía

 

Amenós i Martínez, L., 2010, IV, pp. 31-48; Catalunya Romànica, 1989, VIII, pp. 299-300; Mallorquí Garcia, E., 2000, II; Sánchez i Rodríguez, M., 2007.