Pasar al contenido principal
x

Interior de la cabecera antes de su derrumbe definitivo

Identificador
09558_08_003
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42º 55' 4.53'' , - 3º 39' 19.72''
Idioma
Autor
Sin información
Colaboradores
Archivo Diputación Provincial de Burgos (Fondo Photo Club)
Derechos
Edificio Procedencia (Fuente)

 

País
España
Edificio (Relación)

Iglesia de San Román

Localidad
Fuente Humorera
Municipio
Valle de Manzanedo
Provincia
Burgos
Comunidad
Castilla y León
País
España
Descripción
LA IGLESIA DE SAN ROMÁN se sitúa en el lugar más elevado de lo que fuera el primitivo núcleo de población, hoy totalmente abandonado al igual que el mencionado templo parroquial. De este último tan sólo se conservan los muros de lo que fuera la fábrica ro m ánica, pudiéndose apreciar todavía algunas de las posteriores remodelaciones. Se trata de un edificio de una sola nave construida de mampostería enfoscada, con espadaña a los pies y una cabecera levantada en perfecta sillería. Es precisamente la cabecera la parte más antigua del edificio, con un ábside semicircular que se cubría con bóveda de horno y un tramo recto con cañón ligeramente apuntado, arrancando en ambos casos de una imposta con doble corte de nacela que recorría todo su perímetro. La luz del exterior penetraba través de una ventana abierta en el hemiciclo absidal y de otra de medio punto dispuesta en el muro sur del presbiterio, cegada posteriormente para abrir bajo ella el acceso a una sacristía moderna, también en ruinas. El desaparecido arco triunfal, apuntado y doblado, descansaba sobre dos columnas provistas de capiteles figurados con temática juglaresca: el de la epístola con un músico y una danzarina y el del evangelio con una figura femenina y una especie de domador que sujeta las riendas de un caballo. Ambos capiteles fueron arrancados de su emplazamiento original y colocados en el pórtico de la iglesia de San Martín del Rojo, donde, dicho sea de paso, no desentonan demasiado pues su escultura guarda un estrecho parentesco con la del citado templo. En el exterior, toda la cabecera se remataba con una cornisa idéntica a la imposta del interior, soportada en este caso por una serie de canecillos de tosca factura, decorados en su mayor parte con motivos geométricos y alguna representación figurada. Ante el estado que presentaba la iglesia fueron desmontados hace algunas décadas y trasladados a Burgos, exponiéndose actualmente en el patio de la Facultad de Teología. El estilo y factura de estos capiteles y canecillos -representativos de un románico muy popular-, así como su relación con las labores escultóricas de otros templos vecinos (San Martín del Rojo) permiten datar su construcción en la segunda mitad del siglo XII. La nave, por su parte, fue reformada en época ya gótica como parecen atestiguarlo las bóvedas de crucería que la cubrían, cuya construcción obligó a recrecer los muros, cegando una antigua aspillera del lado sur y abriendo una ventana más moderna a su derecha. La portada meridional, labrada a trinchante, parece corresponder al mismo momento. Por último hay que señalar que en el siglo XVI se cubrió todo el interior con pinturas murales, tal como hemos podido ver en algunas fotografías antiguas, decoración que se extendía también por la fachada meridional que a buen seguro iba protegida por un pórtico más moderno, de ahí que todavía se conserven algunos restos.